No te contengas porque tienes miedo a lo desconocido. Aunque es arriesgado hacer algún tipo de cambio en tu vida, es mejor que la alternativa. No querrás terminar estancado, sintiéndote miserable e insatisfecho.
No te querrás quedar en tu zona de confort por mucho tiempo cuando se vuelve cada vez más incómodo cada día. No querrás terminar frustrando tu potencial porque estás demasiado asustado para arriesgarte a ti mismo.
mágicamente para mejor. Si alguien sigue haciéndote promesas, ya sea tu novio o tu jefe, y esas promesas nunca se hacen realidad, entonces no puedes confiar en que las cumplirán. No puedes esperar que te den lo que juraron que te darían.
Solo pueden posponer las cosas por un tiempo antes de que quede perfectamente claro que en realidad no van a cumplir su palabra, que no obtendrás lo que querías todo el tiempo.
No se contenga porque le preocupa a quién dejaría atrás en el proceso. Las personas que te aman quieren lo mejor para ti.
Quieren que seas feliz. Si tiene que viajar lejos de su familia o renunciar a un trabajo donde tiene muchos amigos, lo entenderán.
Ellos estarán allí para ti. Es posible que ya no te vean todos los días, pero seguirán en contacto. Tu amistad no tiene que terminar.
No te contengas porque una parte de ti siente que no mereces el éxito. Tienes que dejar de escuchar la voz desagradable en la parte posterior de tu cabeza.
Tienes que dejar de tratarte a ti mismo como si no valieras nada. Tu importas. Y vas a hacer algo por ti mismo. Tienes que dejar atrás tu actitud pesimista y autocrítica y reemplazarla por una optimista y que se precie.
Tienes que empezar a hablarte a ti mismo con más amabilidad. Tienes que empezar a creer que te mereces el mundo.
No te contengas porque sientes que ya estás atrasado, que ya perdiste tu oportunidad de ser feliz, que no hay esperanza para ti.
Nunca es demasiado tarde para seguir tus sueños. Tienes que dejar de compararte con todos los que te rodean porque es un juego peligroso.
No importa qué tan avanzados estén tus amigos con sus relaciones o sus carreras. Tienes que mantener tu enfoque en tu propio camino, tus propios éxitos, tus propias aspiraciones. Sigue adelante. Sigue intentándolo. Sigue creyendo.
No te detengas porque hacer el esfuerzo de revisar tu vida parece un desafío demasiado grande. No tienes que hacer cambios masivos de la noche a la mañana.
No tienes que dejar tu trabajo por capricho y comprar un boleto de avión. Puedes empezar poco a poco. Puedes modificar tus hábitos. Puedes correr riesgos. Puede decidir que vale la pena el esfuerzo, el tiempo, la atención. Puedes lanzarte hacia adelante después de pasar tanto tiempo conteniéndote.