CDMX.- El secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, ha informado que al concluir la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, las finanzas públicas de México se han mantenido en equilibrio a pesar de los desafíos causados por la pandemia de Covid-19 en el año 2020. Destacó que el país logró mantener uno de los niveles más bajos de endeudamiento en comparación con otras naciones como Estados Unidos y España, con un aumento del 4.9 por ciento del producto interno bruto.

Durante la presentación de un balance del manejo de la hacienda pública, Ramírez de la O resaltó que la economía mexicana se ha sustentado en cuatro pilares fundamentales, entre los cuales se destaca el apoyo a los sectores populares mediante incrementos salariales sostenidos, alcanzando un 114.5 por ciento en términos reales del salario mínimo, además de la asignación de programas sociales para asistir a la población con menores ingresos.

Otro aspecto clave mencionado por Ramírez de la O es la reorientación regional del presupuesto, con una canalización de 5 billones de pesos hacia el sureste del país. Esta medida, característica de la administración actual, tiene como objetivo impulsar el desarrollo económico en zonas históricamente rezagadas.

Ramírez de la O señala que hay estabilidad en las finanzas de México

El secretario de Hacienda hizo hincapié en la importancia de mantener un equilibrio en las finanzas públicas a través de reuniones constantes con el presidente para ajustar los ingresos y gastos de manera oportuna. Asimismo, se busca mantener la deuda pública estable, actualmente en un 48.6 por ciento del PIB, una cifra que se mantendrá estable en el futuro cercano.

Por su parte, el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, destacó las acciones tomadas para mantener una deuda pública sostenible y responsable, con un manejo robusto y diversificado en los mercados financieros. México cuenta con la confianza de los inversionistas y calificadoras internacionales, lo que ha contribuido a mantener condiciones favorables de financiamiento.

En cuanto al endeudamiento, se busca mantener una política anclada que evite presiones futuras sobre las finanzas públicas. A pesar del impacto inicial de la crisis de Covid-19 en la deuda pública, se ha logrado reducir gradualmente su nivel y mantenerlo en líneas similares a las recibidas al inicio de la administración. Durante la pandemia, no se tomó más deuda de la aprobada por el Congreso y no se consideró un endeudamiento adicional por el impacto del virus.

Podría interesarte:

• México no participará en reunión de la OEA para analizar elección en Venezuela: AMLO
• Trabajo infantil se convierte en un problema grave en México