La Fiscalía General del Estado de Puebla informa que vinculó a proceso judicial a los cinco hombres y dos mujeres que detuvieron la semana pasada en la autopista Veracruz-Puebla, acusados ​​de secuestrar a nueve mujeres. Estos delincuentes se enfrentan a acusaciones por privar ilegalmente de la libertad y tratar a personas en su modalidad de trabajos forzados.

Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y de la Guardia Nacional (GN) rescataron a las nueve mujeres que habían privado de su libertad el sábado 20 de enero. Cerca de la localidad de San Agustín Tlaxco, detuvieron tres camionetas en las que viajaban las víctimas, seis mujeres adultas y tres menores de edad. En ese momento, se creía que provenían de Hidalgo, Oaxaca y Veracruz.

Una falsa promesa de rehabilitación para las mujeres

Sin embargo, la realidad de este terrible suceso es aún más desgarradora. Las entrevistas con las víctimas revelaron que las habían captado en diferentes fechas y les habían prometido una rehabilitación religiosa para curar sus adicciones en el “Centro de Regeneración Adulam”. Tristemente, en lugar de encontrar ayuda, las sometieron a tratos crueles y a una incomunicación total con sus seres queridos.

Estas mujeres estaban obligadas a realizar trabajos forzados, castigadas sin recibir comida adecuada e incluso encerradas en áreas insalubres. Además, solo se les permitiría bañarse una vez a la semana frente a su líder religioso y se les prohibía tener cualquier contacto con sus familiares.

Gracias a una investigación realizada a cabo por la Fiscalía de Puebla, se recolectaron pruebas contundentes que lograron la vinculación a proceso de los siete imputados. Como medida cautelar, un juez dictará la prisión preventiva oficiosa para los acusados ​​mientras se lleva a cabo la investigación complementaria.

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