El gobernador Samuel García presentará una iniciativa ante el Congreso local para reubicar la refinería de Cadereyta, con el objetivo de enfrentar de manera efectiva la creciente contaminación en el área metropolitana de Monterrey. García considera que esta medida es la solución única y prolongada para combatir los altos niveles de polución en la región.

Según el mandatario, la refinería de Cadereyta es una de las principales responsables de los altos niveles de contaminación en la zona y del aumento de enfermedades respiratorias en niños y niñas.

«No podemos seguir comprometiendo nuestra salud y la de las futuras generaciones. La reubicación de la refinería de Cadereyta es la única solución efectiva y a largo plazo para abordar la contaminación en el área metropolitana», declaró García.

El gobernador también destacó la importancia de actuar de manera decisiva en la protección del medio ambiente, tomando como ejemplo a países como Singapur y Japón, donde han creado zonas industriales alejadas de las áreas residenciales para reducir la contaminación.

García hizo un llamado al Gobierno Federal y a Pemex para que tomen en cuenta la salud de los habitantes de Nuevo León y de las futuras generaciones.

Protestan para exigir el cierre de refinería

Manifestantes en Monterrey exigen el cierre de la refinería de Petróleos Mexicanos (Pemex), señalándola como la principal responsable de la alta contaminación en la ciudad. Miles de habitantes se congregaron este domingo en la Macroplaza, convocados por colectivos y activistas preocupados por la calidad del aire.

Con pancartas en mano y máscaras antigases, los manifestantes alzaron su voz exigiendo medidas más estrictas por parte del Gobierno para frenar la polución. Según los informes, la refinería es responsable del 90% de las emisiones de dióxido de azufre presentes en Monterrey. Lo que ha llevado a la ciudad a ser considerada una de las más contaminadas del continente.

Mariana Peña, una joven ciudadana de 24 años, expresó su preocupación ante la situación: «El aire que estamos respirando nos está matando”. Además, citó un estudio realizado por expertos locales que revela que aproximadamente el 30% de las partículas PM 2.5 y PM10 provienen de la refinería.

La problemática de la contaminación también ha sido relacionada con enfermedades en la zona metropolitana de Monterrey, según investigaciones mencionadas por los manifestantes.

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