En Quintana Roo, el hombre conocido como Miguel Ángel “N” y apodado El Tigre, fue vinculado a proceso por el delito de homicidio calificado.

Este individuo, señalado como operador del Cártel de Sinaloa en la región, enfrentará la justicia luego de ser investigado por su presunta implicación en un asesinato ocurrido en el municipio de Benito Juárez.

Un juez determinó judicializar el caso de El Tigre, quien en el pasado ocupó el cargo de Director de la Policía de Investigación (PDI) de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo.

Como medida preventiva, se dictó su prisión por un periodo de dos años, permitiendo así que las autoridades continúen con las investigaciones pertinentes.

Este suceso ha sacudido a la comunidad local, generando preocupación por la presencia del crimen organizado en la región.

La violencia desatada ha cobrado una nueva víctima, en este caso, Roberto Tamayo, también conocido como “Gallo” en el mundo del boxeo profesional.

Con una destacada trayectoria en la división de peso superligero, Tamayo dejó un legado de 36 combates, 12 victorias por nocaut y un porcentaje de efectividad del 58.33% en este ámbito.

Sin embargo, el destino de Tamayo se vio truncado por un acto de violencia sin sentido. Su muerte, la tercera por motivos de homicidio en Ciudad Obregón durante el año 2025, refleja la creciente inseguridad que azota la región y que está estrechamente relacionada con el crimen organizado.

Las autoridades locales, ante la falta de detenciones relacionadas con el asesinato de Tamayo, han iniciado una exhaustiva investigación para esclarecer los motivos detrás del hecho y llevar ante la justicia a los responsables.

La comunidad deportiva y los habitantes de Ciudad Obregón claman por justicia en un contexto de violencia que parece no dar tregua.

Por otro lado, la vinculación a proceso de Miguel Ángel “N” ha sido un paso importante en la lucha contra el crimen en Quintana Roo.

Este hombre, identificado como integrante del Cártel del Pacífico y líder de una célula delictiva, ha sido considerado como un objetivo prioritario en la región.

Su detención, junto con la captura de otros cinco individuos, entre ellos Raúl “N” o Güero Palma, ha marcado un golpe significativo al narcotráfico en la zona.

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