CDMX.- WeWork, la empresa global de espacios de coworking, se ha declarado en bancarrota en Estados Unidos. Sin embargo, es importante aclarar que esta declaración de bancarrota no tiene un impacto negativo en las operaciones de WeWork en México y la región latinoamericana.

WeWork opera en México y otros países de América Latina como un joint venture en el que Softbank Latin America Fund es el accionista mayoritario con el 71%, mientras que WeWork global posee el 29%. Esta estructura de negocio garantiza una independencia financiera, económica y de toma de decisiones con respecto a la sede central en Estados Unidos, lo que significa que la declaración de bancarrota no tiene efectos en la región.

Karen Scarpetta, CEO de WeWork Latam, que abarca México, Colombia, Brasil, Chile y Argentina, enfatizó en una entrevista con Forbes México que la independencia operativa de WeWork Latam respecto a WeWork global les ha permitido cerrar la primera mitad del año con un crecimiento de más del 31% en los ingresos en comparación con el mismo período del año anterior. Además, experimentaron un crecimiento del 26% en el segundo trimestre en comparación con el primer trimestre de este año.

WeWork seguirá operando en México y Latinoamérica sin problemas

«Por esta razón, podemos afirmar con confianza que la decisión de WeWork global de entrar en el Capítulo 11 no tiene ningún impacto en nuestra operación y en nuestro objetivo de construir un crecimiento sostenible«, destacó Scarpetta.

Esta independencia de operación también ha permitido a WeWork Latam adaptarse a las cambiantes condiciones del mercado en México y América Latina. A diferencia de las ciudades de Estados Unidos, donde el trabajo desde casa ha tenido un impacto significativo en el sector de bienes raíces, la región ha encontrado un equilibrio entre trabajar desde casa y en la oficina. Esto ha llevado a WeWork a explorar nuevos modelos de negocio, como el pago por uso y ser sede de eventos externos.

Además, WeWork Latam ve una gran oportunidad de crecimiento con el nearshoring mexicano. Scarpetta señaló que desean ser más ágiles en el apoyo a empresas internacionales que ven a México como una gran oportunidad. Mientras que en un modelo tradicional, establecerse en un nuevo país podría llevar de 12 a 18 meses, WeWork puede hacerlo en tan solo 1 o 3 meses como máximo.

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