El pasado jueves 23 de enero, la violencia en Culiacán, Sinaloa, cobró la vida de Marco Antonio Sánchez Múñoz, conocido como «El Bob Esponja», miembro de la facción de «Los Chapitos», en medio de la disputa interna que los miembros de «Los Mayos» mantienen en el cártel de Sinaloa.

El cuerpo de «El Bob Esponja» fue encontrado en el fraccionamiento Villa Bonita, con las manos atadas y signos de tortura. Sánchez Múñoz era compadre de Fernando Pérez Medina «El Piyi», ex jefe de seguridad de Iván Archivaldo Guzmán Salazar, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán.

Aunque residía en el fraccionamiento Las Moras, el lugar donde fue hallado sin vida no era su hogar. En redes sociales circula un video que muestra los momentos previos a su muerte, donde se le interroga.

Originalmente, Sánchez Múñoz era fletero en Sinaloa y posteriormente se convirtió en mensajero de «Los Chapitos», transportando drogas para ellos. Sin embargo, se volvió popular gracias al corrido «El Bob Esponja», creado por el Grupo Máximo Grado, donde se relata su historia y su conexión con la familia Guzmán.

La violencia en Culiacán no se detuvo con la muerte de «El Bob Esponja». También ese día perdió la vida Adal Peña, influencer fitness en la ciudad. Además, un dron con explosivos destruyó el cenotafio de Édgar Guzmán López, hermano de Ovidio Guzmán, hijo de «El Chapo» Guzmán, ubicado a las afueras del City Club en Culiacán.

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