La tarde de este martes fue asesinada, a balazos, Teresa Magueyal, una de las madres buscadoras del colectivo «Una Promesa Por Cumplir».
La víctima, integrante del colectivo, buscaba a su hijo José Luis Apaseo Magueyal, quien desapareció el pasado 6 de abril de 2020 en San Miguel Octopan.
De acuerdo con primeros reportes, la mujer fue interceptada, cerca del mediodía, por un grupo de desconocidos cuando viajaba en su bicicleta a las afueras del Jardín de Niños de San Miguel Octopan, en Celaya, en el estado de Guanajuato.
Los disparos le provocaron heridas mortales en la cabeza y el pecho, por lo que los equipos de emergencia no pudieron salvarle la vida.
Testigos de lo ocurrido alertaron a las autoridades a través de una llamada al 911; rápidamente, policías y paramédicos locales acudieron a la calle Melchor Ocampo, casi esquina con la avenida Constitución, donde encontraron a la mujer sin vida.
Al percatarse de que la mujer ya no contaba con signos vitales, los paramédicos cubrieron su cadáver con una sábana blanca y acordonaron la zona de los hechos.
Además, las autoridades encontraron varios casquillos percutidos de arma corta, por lo que se solicitó la presencia de la Fiscalía General del Estado.
Colectivo de madres buscadoras lamenta lo sucedido
“Hoy otra madre fue asesinada sin conocer el paradero de su hijo”, lamentó el colectivo de búsqueda de personas desaparecidas en Guanajuato.
A través de sus redes sociales, el colectivo de madres buscadoras «Una Promesa Por Cumplir» condenó los hechos y exigió a las autoridades justicia, ya que la madre había muerto sin saber el paradero de su hijo.
“En Guanajuato, las mujeres que buscamos no estamos seguras, nos matan a plena luz del día, en espacios públicos y en total impunidad”, acusó el colectivo.
El colectivo aseguró que continuará con la búsqueda del hijo de Teresa y de todas los desaparecidos en Guanajuato, que suma 2 mil 913 víctimas hasta este martes, de acuerdo con datos de la Secretaría de Gobernación (Segob).
“Hacer el trabajo que no realizan las autoridades, que es buscar a nuestros familiares, no debería significar una sentencia de muerte”, sentenció el colectivo.
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