Las autoridades de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) han identificado el cuerpo de un migrante encontrado sin vida en el interior de una maleta abandonada en la ciudad de Juchitán.
El pasado 4 de noviembre, vecinos de la colonia Zapandú reportaron la presencia de una maleta en la banqueta frente a un domicilio particular, la cual contenía restos humanos.
Tras la movilización de la Policía Municipal de Juchitán, se acordonó el área para permitir a las autoridades realizar el levantamiento del cadáver. Fue hasta el jueves 14 de noviembre cuando se logró identificar el cuerpo como el de Jhon Anthony E. M., un migrante nicaragüense de 22 años de edad, gracias a los tatuajes que portaba en su cuerpo.
Según informes, la víctima había sido detenida por delitos menores días antes, pero tras ser liberado fue encontrado sin vida en la maleta. Hasta el momento, ningún familiar se ha presentado para reclamar el cuerpo, por lo que las autoridades planean proceder a la inhumación en una fosa común en los próximos días.
El macabro hallazgo ocurrió en una de las calles más transitadas de la ciudad, lo que ha generado conmoción entre los habitantes de la zona. A pesar de los esfuerzos por parte de las autoridades para combatir la violencia en Juchitán, las ejecuciones continúan en aumento en diferentes áreas de la localidad en los últimos tres meses.
Migrantes en Oaxaca
Cabe mencionar que en diversas comunidades de Oaxaca, la llegada de caravanas de migrantes ha generado opiniones divididas entre los habitantes, comerciantes y autoridades locales. Mientras algunos ven beneficios económicos en venta de comida y bebidas, alquiler de baños y transporte a municipios vecinos, otros se enfrentan a problemas como acumulación de basura, peleas por el uso de servicios básicos y robos.
El presidente municipal de San Pedro Tapanatepec, Humberto Parrazales, recuerda con preocupación cómo en años anteriores la población migrante colapsó los servicios y el comercio local, lo que generó tensiones en la comunidad.
Por su parte, la alcaldesa Tania Isabel Escobar, de Santo Domingo Zanatepec, destaca los desafíos que enfrentan al tener que pagar la renta del predio donde llegan las caravanas migrantes, propiedad del ejido, y posteriormente invertir en la limpieza del lugar.
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