En una escena que desató risas, memes y reflexiones sobre el avance de la inteligencia artificial, un joven se llevó una inesperada sorpresa al pedirle a su auto Tesla que lo llevara a un sitio donde nunca hubiera estado. El destino: ¡un gimnasio! Sí, así como lo lees. La anécdota se volvió viral en TikTok y dejó a miles de usuarios entre la carcajada y la sospecha sobre si el vehículo fue intencionalmente sarcástico.

El protagonista del video viral es un hombre joven, de entre 20 y 30 años, quien aparece dentro de su Tesla acompañado por una mujer. Con total confianza en el Piloto Automático del auto, activó el comando de voz y le dio una instrucción clara: “Llévame a un lugar donde nunca haya estado”. Un pedido simple, pero con un giro inesperado.

El coche, utilizando su tecnología de navegación, inició el trayecto mientras los pasajeros se mostraron intrigados por cuál será el destino. “Esto será interesante, parece que no hay restaurantes”, comentó la mujer, extrañada al ver que el entorno no coincide con zonas de ocio o gastronomía.

Al llegar, la sorpresa fue total: el vehículo se estacionó frente a un gimnasio local. La reacción del dueño fue inmediata: entre risas nerviosas y algo de frustración, comenzó a gritarle al coche: “¡Qué te den!”, mientras la escena era registrada en video.

Más allá del chiste, la situación plantea preguntas curiosas sobre la personalización de los datos en los sistemas inteligentes. Aunque no hay evidencia de que el Tesla realmente “supiera” que su dueño no visita gimnasios, el algoritmo podría haber elegido ese destino simplemente por no haber sido registrado en la lista de lugares frecuentados del usuario.

Sin embargo, no faltan quienes ven esto como una prueba de que los autos inteligentes están más conscientes de nuestros hábitos de lo que pensamos.

El Piloto Automático de Tesla combina cámaras, sensores y software de asistencia que permiten funciones de conducción semiautónoma. Entre ellas está la capacidad de reconocer comandos de voz, trazar rutas optimizadas y evitar colisiones. Pero hasta ahora, no se conocía su sentido del humor.

Este evento fue usado también por algunos influencers para hablar de cómo la tecnología está empezando a tener comportamientos que, aunque programados, simulan cierto nivel de inteligencia emocional o “personalidad”.

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