Alternativas
Por: Emmanuel Salazar
Hace algún tiempo se llego a proponer la posibilidad de que Durango recibiera una compensación por los servicios ambientales que propicia el bosque duranguense, el cual se sabe es una especie de fabrica de lluvia, que aprovecha Coahuila, Sinaloa y hasta Nayarit.
Los grandes escurrimientos que se emiten con las fuertes precipitaciones pluviales propiciadas por el bosque duranguense, paradójicamente no son aprovechados en Durango, pero sí en los estados vecinos en donde existen grandes extensiones de riego.
El tema viene a colación a raíz de la falta de recursos que padece Durango, y de la cual aparentemente está condenado a sufrir en los años siguientes, pues la «Cuarta Transformación» busca centralizar el gasto, y asfixiar a los Gobiernos estatales, lo cual resulta fácil en el caso de nuestra entidad, debido a la dependencia económica con la Federación.
Si Durango cobrara esa agua que permite los grandes riegos en las entidades vecinas, quizá podría contar con los recursos que ahora le hacen falta, y que parecen condenar a nuestra entidad a mendigar el apoyo federal.
Es un contrasentido que el Gobierno federal imponga a la entidad la prohibición de poder aprovechar los grandes caudales, porque esa agua que escurre de la sierra la acaparan entidades vecinas.
Quizá el tema pueda ser un argumento para poder contar con recursos, esos que resultan escasos y que de acuerdo al Proyecto de Presupuestos de Egresos de la Federación, Durango nuevamente será marginado y quienes pagaremos las consecuencias seremos quienes vivimos en esta tierra.
Por lo pronto, el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación contempla reducciones en participaciones y aportaciones, como ocurre con prácticamente todos los estados del país, pero en el caso de Durango se resiente aún más debido a la condición de falta de desarrollo que se padece prácticamente desde la época posrevolucionaria.
Y si bien, se pueden cobrar los servicios ambientales, algo más cercano y real puede ser que por fin las legisladoras federales de Morena representen a Durango, junto con el único diputado federal del PRI, para intentar evitar tanta afectación económica para la entidad.
El centralismo en el gasto habrá de ser reforzado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien carece de una personalidad reformista y pareciera que busca retomar el status quo que teníamos en la década de los años 70 y 80 en los que la preponderancia del Estado pretende ser recuperada a consta de lo que sea, incluso de la economía misma.