Por: Quetzal Herrera

Tras la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio fiscal del 2021, el sector campesino necesita el respaldo de todas las fuerzas políticas, de entrada por el simple hecho de pensar en que nuestro país pueda ser poco a poco autosuficiente, como fue una de las propuestas del presidente López Obrador, no solo en la implementación de programas sociales, sino en la aplicación de recurso para obras que beneficien las zonas productivas del territorio nacional; tal cual ha sido la lucha del sector campesino del Revolucionario Institucional, en la discusión del paquete económico, donde Ismael Hernández Deras participó de manera activa a distancia, derivado de la condición de salud en la que se encuentra en estos momentos.

En el caso de nuestro estado, uno de los temas que más ha impulsado el gobierno de José Rosas Aispuro Torres, y que Hernández Deras junto con los legisladores cenecistas en la Cámara de Diputados impulsaron, fue lo relacionado a la aprobación de presupuesto para la construcción de la presa El Tunal 2, misma que beneficiaría en gran medida la producción agrícola y ganadera de una importante zona en la entidad; propuesta que no tuvo eco por parte de la mayoría representada en San Lázaro, y que a pesar de ello me parece que la lucha por la gestión de recursos no deberá detenerse aquí, sino por el contrario, seguir haciendo un frente común para que desde la federación se respalden este tipo de proyectos.

Hernández Deras durante la noche en que se discutió este presupuesto para el 2021, estuvo en comunicación constante con sus compañeros integrantes de la comisión de recursos hidráulicos, así como con la presidenta de la mesa directiva, Dulce María Sauri Riancho, buscando las negociaciones que les permitieran a los campesinos acceder a un mejor presupuesto, mismo que de acuerdo a la CNC castiga a los estados y municipios.

Tras la discusión y votación en el pleno, López Obrador felicitó a los legisladores por la aprobación casi intacta de la propuesta que les envío, estructurada bajo una visión más asistencialista como ha sido la costumbre de este Gobierno federal, y hablando específicamente del respaldo a las comunidades rurales de nuestro país, veremos hasta dónde es redituable políticamente para el Presidente el próximo año, ya que los campesinos desde luego que tomarán postura respecto a estas decisiones; más allá de tintes políticos e ideologías me parece que el respaldo al campo puede ser una de las mejores políticas públicas que cualquier Gobierno, de cualquier nivel, puede implementar con extraordinarios resultados.

Ha sido el último paquete fiscal que a la actual legislatura de la Cámara Baja le corresponde analizar y votar en su periodo, y de los resultados en la implementación del mismo, se sabrá las consecuencias de sus decisiones, si la política económica marcada desde Palacio Nacional iguala las expectativas de crecimiento propuestas al inicio de la administración, o si en los próximos años de la administración federal tendrá un cambio de rumbo; en cuanto al campo me parece que más partidos deberán sumarse a las peticiones que organismos campesinos, como el que encabeza Ismael Hernández, tienen para mejorar sus condiciones de vida y laborales, porque parten de reclamos justos, incluso en una situación más compleja derivada de la pandemia por el coronavirus, que volvió más complejo el desarrollo de las familias que viven de las actividades del campo; ojalá la lucha continúe.

Twitter: @QuetzalH