La inseguridad
Por: Emmanuel Salazar
Las redes sociales diseminaron diversos videos de ciudadanos y reporteros de Culiacán, quienes atestiguaron diversas balaceras registradas tras la detención de un personaje vinculado a la delincuencia organizada por parte de fuerzas federales, en un fenómeno de zozobra y preocupación real.
Si bien, la ciudad de Durango vive desde hace algunos años una situación de tranquilidad, nadie se desentiende de que el tema cuenta con un frágil equilibrio, el cual puede ser fácilmente trastocado y provocar alguna escalada de violencia que nadie quiere volver a vivir.
En las mismas redes sociales las cuentas falsas y perfiles anónimos comenzaron a reproducir mensajes a favor y en contra del Gobierno federal, unos para respaldar y otros para denostar el trabajo emprendido hasta ahora por el Gobierno encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Más allá de esa manipulación, la población mexicana en general debería respaldar toda aquella acción que permita a la sociedad volver a retomar el control de lo lícito y legal sobre todo aquello que se contraponga ese orden.
Los mexicanos, y por ende los duranguenses, debemos aceptar y pugnar por lograr mantener o reestablecer, según sea el caso, el clima de legalidad en nuestra sociedad, y si el Estado, hoy encabezado por el presidente López Obrador, da un paso en ese sentido, independientemente de las diferencias que pueda haber, se debe cerrar filas y respaldar.
México debe recuperar la legalidad y evitar la simulación, si el presidente López Obrador hace un esfuerzo en ese sentido, debe haber respaldo de todos en general y hacer a un lado las pugnas políticas, pues por encima de las corrientes políticas debe de estar el estado de derecho.
Ojalá y el Gobierno Federal haya decidido dar un paso hacia el reestablecimiento de la legalidad, y si bien puede haber reacciones virulentas como ocurrió en Culiacán la tarde de este jueves, es preferible tener ese tipo de crisis a mantener la simulación que poco a poco asfixia a una sociedad que ha permitido cohabitar con la delincuencia como si pudiera domesticarla, lo cual en los hechos no ocurre.
Las imágenes mostradas en videos compartidos en las plataformas digitales, permiten observar y contagiarse de una sensación de incertidumbre y falta de seguridad, que esperamos sea sólo parte de un reestablecimiento real del orden
Hacemos votos porque nuestra ciudad y estado evite una circunstancia como la que se vivió en Culiacán, y que logremos articular el real estado de derecho.