LA PALABRA DEL GIOCONDO… Foquitos de marquesina
Por: Alejandro Flores de la Parra
El Cabildo de la capital, a lo largo del tiempo, se ha caracterizado por servir de marquesina para hacer pronunciamientos a favor o en contra del Gobierno en turno. Normalmente, los señalamientos son infértiles y el apoyo es poco objetivo; o se critica todo, o se defiende todo, siempre persiguiendo un posicionamiento que les permita aspirar a un mejor cargo, en el futuro.
Lo anterior, no sucedió durante la administración pasada, ya que todo transitó armoniosamente dentro del Cabildo, siendo calladas la voces críticas con «billetazos». De ahí que hoy, quienes más fuerte gritan, hablen mucho de «falta de operación política», quizá pretendiendo que alguien los «convenza» de cambiar su discurso.
Los grupos políticos al interior, no han mostrado, siquiera, coordinación en acciones. La fracción panista, pasiva y sin capacidad de reacción, pareciera estar dispersa, sin ser un bloque que debiera actuar como muro de contención y que, algunos de sus miembros, se les ve, incluso, más preocupados por posicionar una futura candidatura en el territorio, que por honrar la posición que ya les fue otorgada por su partido.
El Partido del Trabajo (PT), que tiene dos miembros que no parecen tener interés por participar en las comisiones y en lo sustantivo de su función, se dedica a votar todo en contra y a alimentar organizaciones buscando poner presión a la administración, con un estilo muy primitivo.
Movimiento Ciudadano, más que una fracción, pareciera estar fraccionado, mientras algunos de sus miembros actúan con prudencia, una Regidora parece no estar de acuerdo, ni consigo misma, cuestionando hasta el color de los semáforos (por exagerar un poco) y exponiendo su falta de conocimiento técnico, como cuando cuestionó la cantidad de recurso asignada a la Ciclovía, para después recular y aceptar que, teniendo los elementos necesarios para su análisis, el costo se justifica. Yo no le critico la falta de conocimiento técnico, pues nadie somos expertos en todo, pero la ignorancia se mata preguntando.
La fracción priista, tiene dos aristas: una Regidora que está cocinando su candidatura a sabiendas de que su liderazgo en el grupo que dirige, al interior de su partido, está por extinguirse y no parece ser soporte suficiente para asegurarle una posición. Por otro lado, un regidor que quiere figurar, pero que solo pareciera acompañante.
La única Regidora por Morena y quien, antes de volverse de izquierda, habría lanzado feroces críticas, denostando al actual Presidente de la república y líder moral del partido que ella representa en el Cabildo; ha llegado a señalar directamente a la tesorera municipal, ya sea por «gastos injustificados» en capacitación de hasta por siete millones de pesos, mismos que le tuvieran que aclarar que no se gastaron en esta administración (sino en la pasada) y solo se trató de una reclasificación en los libros contables del Ayuntamiento; hasta criticar una prórroga para presentar la cuenta bimestral, que había sido aprobada de manera unánime por la comisión de hacienda, a la que ella misma pertenece y que, por lo visto, asistir no está en sus prioridades.
Como ciudadanos, debemos exigirle resultados a la administración pública municipal, porque la expectativa de cambio en nuestro entorno es muy alta y, por eso le dimos, o no, nuestro voto. Pero, principalmente, debemos exigir a quienes nos representan y son nuestra voz en el cabildo, que dejen de ser foquitos de marquesina y de buscar que los «operen» políticamente, para empezar a ser un legítimo contrapeso que logre encaminar las acciones del ayuntamiento, en favor de la sociedad.
Twitter: @AlejandroFdelaP