Por: Erik González

Nos parece queridos amigos, que tiene razón el secretario de Marina Rafael Ojeda Duran que el Poder Judicial es el enemigo número uno del pueblo. Y esto lo confirma después de que en esta semana un juez de Tamaulipas le diera un amparo a Cabeza de Vaca para postergar su desafuero promovido por el poder legislativo federal y donde la controversia constitucional promovida por el Congreso local para evitar que se emitiera una orden de aprehensión fue desestimada. Faustino Gutiérrez Pérez, juez Octavo de Distrito en el estado de Tamaulipas, señaló que “el requisito de procedibilidad para el ejercicio valido de la acción penal en su contra por delios que le atribuya la FGR al todavía gobernador de Tamaulipas.

Hay que recordar que el que enredó todo esto para ganar tiempo y fuera arrestado el gobernador de Tamaulipas fue el ministro Juan Luis Alcántara Carrancá, quien sugirió que solo podrá ejercerse acción penal cuando este terminará su cargo. Es por ello, que este amparo es oportunista producto de todo este embrollo al aprovechar esta confusión y desde luego que en el uso extralimitado del poder de un juez federal se suspende la captura del gobernador desaforado hasta el próximo 7 de junio.

Hay que recordar que Cabeza de Vaca desde que era alcalde de Reynosa, Tamaulipas conformó una amplia y organizada red delincuencial (el huachicol, el narcotráfico, lavado de dinero…) en la que incluyó familiares, a funcionarios públicos y a miembros del partido Acción Nacional (PAN) como Gil Zuarth y Javier Lozano, estos últimos miembros muy cercanos al expresidente Calderón. Dice Alejandro Díaz Duran que Guil Zuart cobra hasta 50 millones de pesos al año, está vinculado a Odebrecht, que tiene contrato de obra en Tamaulipas. Todos ellos son una red de lavado de dinero. Todas estas triangulaciones entre el gobernador, Lozano y Gil Zuarth los genero en su momento Genaro García Luna.

Queridos amigos pero esta red delincuencia va más allá de un gobernador huachicolero  el periodista de  Emeequis, Óscar Balderas, reveló en septiembre de 2019 un memorándum de Tobin Bradley, ex cónsul de EU en Matamoros, Tamaulipas que daban cuenta de un “encuentro de Francisco Javier García Cabeza de Vaca con ‘El Chapo’ Guzmán. En el mes de febrero de 2012, esta persona sostuvo una serie de reuniones con el señor Genaro García Luna y que una de estas citas se llevó a cabo en la ciudad de Cabos San Lucas, Baja California sur”. Con estas revelaciones Cabeza de Vaca se suma a la lista de Tamaulipas vinculados al crimen organizado como es el caso de Tomas Yarrington y Eugenio Hernández ambos ligados al cartel del golfo.

El Poder Judicial tan pequeño moralmente y sin un horizonte de justicia al estar a los ojos de todos vendiendo impunidad a quien la pueda pagar; no es casualidad o error humano, detener la Ley de hidrocarburos que afecta a los intereses privados; amparar a delincuentes como “el marro”; proteger a las empresas trasnacionales y políticos que se han enriquecido ilícitamente y que obviamente pueden pagar el precio de grupo de jueces monetarizados y que no son los menos. Con todas estas pruebas ahora sabemos que el Poder Judicial es una estructura podrida y enquistada producto de la cleptocracia y neoliberalismo de los últimos 20 años por lo menos en los que se reclama un cambio profundo para regresarle la justicia al pueblo de México.

Queridos amigos, es lamentable que el secretario de Marina Rafael Ojeda Duran tenga razón y refiera que en el combate al crimen en los puertos marítimos el enemigo número uno “parece ser” es el poder judicial. Con esto nos parece que la autonomía no debe de ser los mismo que defender a los delincuentes poderos ya sea que provengan del narcotráfico o de la política y que tienen el dinero para pagar impunidad. Sin duda está en una crisis profunda el poder judicial a la que no se le ve pronta solución.