Por: Dionel Sena

El gobernador José Aispuro Torres marcó agenda este miércoles, tras asegurar -en una entrevista banquetera- que no estaban pidiendo dádivas al Gobierno federal, sólo se estaba gestionando lo que a Durango el correspondía, en relación al Presupuesto de Egresos de la Federación 2020, por lo que citó de manera textual… ¡Aunque se enojen! lo seguiremos haciendo, lo que inevitablemente llamó la atención del círculo rojo, pues está claro que el mensaje tiene nombre y apellido, pues hay algunas voces que se han manifestado en ese sentido y paradójicamente son de aquí mismo, lo que deja en claro que hay a quienes no quieren que le vaya bien a esta entidad, más allá  que el discurso sea otro, en los hechos poco o nada han hecho para que este estado reciba el presupuesto que se necesita para salir de las necesidades que se tienen.

Fue enfático al asegurar que juntos, es decir, Gobiernos municipales, Gobierno estatal, y diputaciones locales y federales, deben formar un frente para que la Federación finalmente le reconozca a Durango lo que le corresponde, pues el escenario hasta ahora no es el más alentador en ese sentido, y por ello la gestión es clave en todo este asunto, de ahí el llamado del ejecutivo que lo que los duranguenses no hagan, nadie más vendrá de afuera a hacerlo por nosotros, indicativo que dicha postura va a continuar y que no quitará el dedo del renglón hasta que dicha proyección presupuestal hacia Durango mejore, lo que tampoco es una garantía de que vaya a ocurrir, pues nada pareciera inmutar a la «4T» de cambiar de opinión, en el sentido de quitarle recursos a los estados, en especial a aquellos no gobernados por Morena, lo que para algunos es una casualidad, sin embargo para otros es algo de lo más normal, pues en su momento lo mismo hicieron los sexenios panistas y priistas.

Otro tema, no menos importante, será lo que hagan nuestras legisladoras federales, mismas que juran y perjuran que quieren lo mejor para Durango, sin embargo, hasta ahora, no se ha sabido de reuniones importantes con integrantes del gabinete federal o con diputados federales de las comisiones de presupuesto que nos hagan pensar que el panorama pudiera cambiar, más allá de las fotos que pudieran llegar a tomarse en San Lázaro, pues la única forma de saber que aman esta entidad es buscando el mayor Presupuesto de Egresos de la Federación posible para el próximo año, caso contrario, serán palabras que se las lleve el viento y que a la mayor parte de los sectores de acá no les pasará desapercibido, es decir, si realmente buscaron ayudar o sólo simularon hacerlo, lo primero es más difícil de comprobar que lo segundo, y eso ya deberían de saberlo, pues el costo en el corto y mediano plazo pudiera ser alto.

Se sabe que en estos días la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO) se va a reunir con el presidente, Andrés Manuel López Obrador, y que seguramente van a aprovechar para echarle montón al tabasqueño y ver si entiende las necesidades de la mayoría de las entidades federativas, mismas que seguramente le han planteado un sinfín de ocasiones, pero que sin embargo no han encontrado eco, más allá de los programas “clientelares” que seguirán impulsándose en los estados con fines netamente electorales, mismos que buscarán capitalizar en el 2021 y en el 2022, para lo cual, los Gobiernos estatales en turno no pueden tener margen de maniobra y quizá por ahí vengan la cosa, claro no sin antes curarse en salud con el petate del muerto de combatir a la corrupción, una línea discursiva que le ha servido al Ejecutivo federal para justificar los recortes presupuestales.

Twitter: @dionelsena