Hijos y nietos despiden a Arturo González Anguiano, quien fuera Jefe de la Policía Judicial del Estado (FGE) y que falleciera el viernes anterior.

Como lo dimos a conocer en una primera nota, González Anguiano también fue Inspector de Policía, ambos cargos cuando era Gobernador Alejandro Páez Urquidi, falleció el viernes anterior.

Luego de una caída en su domicilio del fraccionamiento Guadalupe, de la ciudad de Durango, lo trasladaron al Hospital General 450, donde lo preparaban para operarle la cadera que se fracturó.

Sin embargo, el viernes tuvo complicaciones y lo que no hicieron las balas cuando fue jefe policiaco, lo hizo un infarto: le quitó la vida.

Luego de que lo velaron en la sala número 3 en Funerales Garrido de calle 5 de Febrero, ayer domingo a las 14:00 horas se llevaron a cabo las honras fúnebres en el templo de la Resurrección, del mismo asentamiento en el que residía.

Sus hijos y nietos

Ahí estuvieron sus hijos Fernando, Mayra Margarita, Hugo y David, así como sus nietos, Brenda Daniela, Mayra Guadalupe, Javier Eduardo, Javier Kaleb, Ana Karen, Mariana, Héctor Hugo, Ignacio, Leonardo, Alejandro, Ximena y Yazmín.

Dentro de los amigos que asistieron, están Sergio Rocha y sus dos hermanos, hijos del periodista Pedro Rocha y Sida, que fuera compadre del fallecido.

Francisco Ávila Cabada, hijo de don Pedro Ávila Nevárez, quien también fuera compadre del ex jefe policiaco, Roberto González, amigo del fallecido.

Aparte de que, con su deceso se encuentra ya reunido con su esposa Margarita y su hijo Arturo, se encuentra también junto a varios de los que fueron sus agentes, jefes de sector y comandantes, ya que de ellos solo sobreviven unos cuantos.

Sus amigos

Por cierto, ahí saludamos a Germán Orozco, hijo de don Eugenio Orozco, que fuera uno de los mas queridos jefes de sector de la PJE por el recién fallecido.

También hermano de Eloy Orozco, éste fue uno los hombres de confianza de Arturo, a igual que otro de los Orozco, Eugenio Jr..

Claro que si vivieran, en esa misa estuvieran presentes muchos de sus elementos, tales como José Guadalupe Bueno, Lorenzo Rosales, Juan Rosales, Epifanio Rosales, Armando Rodríguez, el mismo Eloy, Carlos Espinoza de Los Monteros, Roberto Flores Ortiz, Félix Alvarado, el mismísimo Francisco, Chico García, jefe del grupo contra el abigeato y don Cástulo Martínez, así como Alfonso Enríquez.

Otros eran los hermanos Rafael, Rosalio, Benito, Manuel, Pablo, Felipe y Margarito, así como el primo Joaquín, de los que solo vive Margarito.

Julián Torres Soto, es uno más de los elementos policiacos de aquellos tiempos.

Carlos Espinoza de los Monteros, era otro de los cercanos, Roberto Ortiz (El Chino), quien falleció ultimado a tiros por una banda de robacoches sinaloenses en un domicilio de la colonia Hipódromo.

Antonio Silerio Esparza, también fue de sus elementos que ya pasó a mejor vida, quien era hermano del ex gobernador Maximiliano.

Por cierto, durante su trienio con Páez Urquidi, González Anguiano era el Jefe de la PJE.

Martin Domínguez Flores, aún vive, pero está un poco delicado de salud y todavía sufre las secuelas de aquél atentado que sufrió junto con otros compañeros en el poblado La Resolana, municipio de Hidalgo, cuando se dirigían a San José del Tizonazo, Indé, Durango.

También sobrevive Gastón, del que nos cuenta Germán, le decían así por su parecido al actor y rejoneador potosino, Gastón Santos.

De todos ellos y oros nos acordamos durante la misa de cuerpo presente, de la que al terminar, el mariachi le tocó algunas canciones, los que empezaron con: Te Vas Ángel Mío y otras que en su vida fueron de su agrado.

Su última voluntad

Tras de lo anterior, trasladaron sus restos a la funeraria para cremarlo, justo en la que es propiedad de Ernesto, hijo de su compadre y tocayo Arturo: Garrido.

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