Aquella noche trágica en que Parral sufrió una de las catástrofes más notorias en su historia, la segunda inundación que azotó a la ciudad dejando pérdidas humanas y millones de pesos en daños, una fuerte lluvia durante aquel 30 de agosto, esa noche en que los habitantes de Parral veían como la madre naturaleza atacaba con toda su fuerza a esta ciudad.

Fue cerca de las 10 de la noche en que comenzó la lluvia, un fuerte torrencial de agua se pudo percibir en toda la ciudad, en cuestión de minutos el río comenzó a crecer exponencialmente cubriendo en su totalidad la vialidad del río, las horas pasaban y la precipitación no desistía, esa noche el río reclamó su cauce sin importar a quien dañaría o dejaría sin bienes a los Parralenses.

Por un lapso de 5 horas se extendió la catástrofe, un aproximado a 187 milímetros de lluvia fueron los que se registraron, suficientes para dejar sin viviendas a cientos de familias, a otros más sin negocios y lamentablemente a varias personas sin vida, todo en cuestión de minutos, la devastación y tragedia cubrió a Parral.

Los trabajos por parte de las diferentes corporaciones de rescate se comenzaron a la brevedad, reportes de personas desaparecidas en diferentes puntos de la ciudad, otros más atrapados en sus viviendas que no podían salir por la creciente del río, las principales colonias afectadas la Talleres, del parque y las fuentes.

El recuento de los daños fue impresionantes, se cuantificaron en aquel momento un saldo de 300 viviendas destruidas, 84 edificios derrumbados, 250 vehículos dañados y al menos 5 personas sin vida y otros más desaparecidos, las pérdidas se calcularon en 100 millones de pesos, la causa se atribuye al desbordamiento de un preson, así como el desbordamiento de la parte alta del Alamillo, todo el río Parral arrasó con la mayoría de los puentes dejando varios sectores incomunicados.

De inmediato se comenzaron los apoyos de todo el estado y los estados vecinos, en esa tragedia los Parralenses se unieron en apoyo a los afectados tras la devastación, cientos de toneladas de alimentos llegaron hasta la ciudad y los diferentes órganos de gobierno lograron juntar una inversión de 265.19 millones de pesos, todo esto para beneficio de los damnificados, a quienes perdieron sus viviendas, sus propiedades y negocios, así como la inversión en construcciones para evitar una futura inundación.

Hoy a 11 años de la inundación de Parral en el 2008, aquella trágica escena que vivieron los parralenses y que siempre recordarán, todo comenzó con una pequeña lluvia y concluyó con pérdidas catastróficas, fue el día que cayó el cielo sobre Parral.