Ha llamado la atención una carta que han realizado motociclistas, con la finalidad de crear conciencia sobre el uso de la motocicleta y el porqué realizan diversas maniobras en la carretera o la ciudad pero principalmente a los automovilistas, aquí el texto integro.

“PARA QUE NOS ENTIENDAS UN POCO MÁS A LOS MOTOCICLISTAS TE PIDO LEAS ESTO”…
Cuando nos veas acercándonos a ti rápidamente:
No te ofendas o pienses que estamos tratando de “lucirnos”. Noventa y cinco por ciento del tiempo, estamos tratando de salir de tu punto ciego o deseamos evitar una situación potencial de peligro que se ha desarrollado alrededor de nosotros. Al distanciarnos de ti no estamos queriendo correr, sino que nos estamos dando la ventaja que necesitamos en ese momento.

Cuando escuches nuestra bocina:
No te ofendas o pienses que estamos tratando de agredirte. Lo que hacemos es nada más para permitirte saber donde estamos en relación a ti en la carretera, somos conscientes de tu falta de atención mientras estás hablando por el teléfono celular, comiendo, leyendo o participando en algún otro aspecto de distracción durante la conducción. Es importante para ti y para nosotros que sepas que estamos ahí.

Cuando escuches los sonidos ensordecedores de nuestros motores:
No te enojes ni actúes hostil con nosotros. Sí, tienes razón, algunos son bastante ruidosos, pero para algunos hay un propósito para ser tan fuertes. Quieren que sepas que están muy cerca y tienen la esperanza que la inversión en este accesorio podrá salvar sus vidas. Lo de nuestros accesorios ruidosos no tiene nada que ver con querer ser ególatras, son nuestro orgullo y así personalizamos nuestro medio de transporte.

Cuando nos ven con nuestra vestimenta:
No te asustes de nosotros ni nos mires de modo extraño. Nuestras chamarras de cuero, chalecos, guantes y botas son nuestra protección para no sufrir heridas de corte en alguna caída, es solo eso… nada más y nada menos. El equipo de seguridad es de suma importancia para nosotros. Llevamos parches en las chamarras y los pines en nuestros chalecos. Estos son símbolos de orgullo y honor de nuestro grupo, los intercambiamos con otros amigos motociclistas. Estas cosas nos unen como una fraternidad y hermandad entre los conductores de motos. Ninguno es mejor que el otro, todos tenemos la misma clase de nobleza y orgullo por nuestros logros en distintos aspectos de nuestras vidas. Supongo que se podría decir que nuestros parches y pines son las calcomanías de los carros, en relación a nuestro compromiso con la sociedad y el público en general, de los cuales estamos muy contentos, a nuestra manera, de formar parte.

Cuando nos ves en un restaurante:
No es necesario que protejas a tu hijo de nosotros o que te sientas intimidado. También tenemos familia, esposas, esposos, hijos y seres queridos y los amamos igual que tu. Nosotros sonreímos, nos reímos y disfrutamos de los momentos. Somos accesibles y si nos das la oportunidad podrás descubrir que somos amigables.

Cuando no ves en un estacionamiento:
No quieras convencerte a ti mismo que debes temernos. Generalmente estamos llegando de un viaje largo y tomamos un descanso. Incluso es probable que estemos esperando reunirnos con otros conductores para llevar a cabo alguna obra benéfica o alguna otra causa dignificante. Quizás solo estemos admirando la moto de otro amigo motociclista, compartiendo nuestro orgullo con otros hermanos y hermanas, es tal cual lo hacen ustedes con sus vehículos.. Eso es lo que hacemos … es una parte de nuestras vidas y nos complacería mucho compartir contigo todo lo que representa conducir una moto, si quieres acercarte a nosotros.

Cuando veas a un motociclista agresivo:
No generalices, no nos categorices a todos bajo la misma conducta de aquellos que te hacen reaccionar con disgusto e intolerancia. Muchos de nosotros no estamos de acuerdo con este estilo de conducción, sabemos y entendemos que la naturaleza humana tiende a juzgar a todos con la misma vara. La mayoría de nosotros no queremos ser estereotipados, y… no nos lo merecemos.

Cuando ves a un grupo de motociclistas en las carreteras:
Danos la cortesía de compartir el camino contigo. Por favor, no conduzcas entre la formación del grupo de motos. Esto nos incomoda y nos pone muy nerviosos, especialmente cuando lo hacen sin respeto por nuestra seguridad. Te pedimos que seas consciente del hecho de que somos mucho más vulnerables que tú. No queremos desafiarte, sabemos perfectamente que perderíamos esa batalla.

Cuando vas a girar a la izquierda o a entrar en una calle o carretera:
Mira una vez, vuelve a mirar una y otra vez más. Podemos estar fácilmente escondidos y parecer invisibles para ti por postes de luz, otro vehículo, luces brillantes o por el resplandor del sol… o incluso algo que llevas en tu espejo retrovisor, u otros numerosos objetos que puedan confundirte. Si nos ves hacer juego de luces o te sonamos la bocina, sólo estamos tratando de asegurarnos de que nos veas, son advertencias para evitar una tragedia y no apeligrar nuestras vidas.

Cuando estás detrás de nosotros:

Por favor, danos el espacio que necesitamos y no te nos acerques demasiado. Si nos golpeas, caemos y muy mal! No queremos competir contigo, sólo queremos disfrutar del viaje, del aire fresco y de la experiencia de la libertad que muchos de ustedes no han vivido. Si nos alejamos rápidamente de ti, no interpretes esta acción como si quisiéramos desafiarte a una carrera, sólo estamos tratando de tomar distancia, para evitar una situación de peligro, que se presenta si insistes en estar demasiado cerca de nosotros.

Cuando experimentes la furia en el camino:
No te la tomes con nosotros, porque somos más pequeños y vulnerables que tu. Piensa en lo que estás haciendo y en el resultado final de esa actitud. Las consecuencias de tus acciones y decisiones podrían ser muy perjudiciales para nuestro bienestar, nuestras familias, nuestros hijos y seres queridos. Sí, hay algunos que pueden hacerte enfurecer, sin embargo, la rabia hacia ellos no va a resolver los problemas, al contrario, los acentúan. Nueve de cada diez motociclistas haremos todo lo posible para salir de esa situación sin causarte daño a ti o a nosotros mismos.

Cuando tienes la oportunidad de hablar con nosotros:
Descubrirás, al margen de cualquier influencia o mentalidad estereotipada que puedas tener, que somos tan humanos como tú, sólo que con diferentes intereses y diversiones. Muchos de nosotros te daríamos nuestra camiseta, si con eso podemos iluminar tú día o brindarte de alguna manera consuelo. Realmente no somos diferentes a ti… también conducimos coches, camiones y camionetas. Por eso, reúnete con nosotros y salúdanos… … creo que tendrás una grata sorpresa y serás recibido con los brazos abiertos

Gracias por tratar de entender y compartirlo con tus amigos…