Tras las especulaciones sobre su retirada de todo el estado, la empresa Wrangler confirmó el cierre de su planta en el municipio de Jiménez.
Los camiones de personal arribaron más temprano y formaron filas para recoger a los ya ex trabajadores y llevarlos a sus colonias.
En esta planta laboraban casi 600 personas, algunas con antigüedad de casi 10 años y que hoy quedan desempleadas.
En días pasados, el gobernador Javier Corral Jurado aseguró que de concretarse el cierre de Wrangler, se vigilaría que los trabajadores fueran liquidados de manera justa, además de que se buscarían alternativas para que no quedaran sin empleo.