Santiago Papasquiaro, Dgo. Una familia santiaguera ha denunciado públicamente la presunta negligencia médica en el Hospital General de Santiago Papasquiaro, luego del fallecimiento de un hombre de 43 años que, según sus familiares, no recibió la atención adecuada pese a presentar síntomas de emergencia.
Los hechos ocurrieron el pasado 25 de enero, cuando el paciente ingresó al hospital con dolor en el pecho y brazo izquierdo, signos claros de una posible afección cardiaca. A pesar de tratarse de una emergencia, su esposa relata que tuvieron que esperar una hora para ser atendidos.
“Nos hicieron esperar turno, según indicaciones de la recepcionista, a pesar de que mi esposo manifestaba un fuerte dolor. Cuando por fin lo revisaron, su presión era de 170/110, pero no le administraron ningún medicamento para estabilizarlo de inmediato”, relató la esposa del fallecido.
Tras la realización de un electrocardiograma, un error en el procedimiento dejó dudas sobre su diagnóstico. Aun así, el paciente fue internado sin recibir un tratamiento oportuno. Durante el cambio de turno, la doctora que ingresó a trabajar el sábado por la noche ignoró por completo al hombre, afirmando que sus estudios no presentaban nada grave, minimizando su malestar y atribuyéndolo a niveles ligeramente elevados de colesterol y triglicéridos.
“Nos dijeron que la presión le bajaría sola y que con eso desaparecería el dolor. Lo único que le dieron fue una enalapril porque él mismo dijo que era su horario de tomarla. Seguía sintiéndose mal, pero nadie hizo nada hasta que sufrió un paro cardíaco y entonces ya no reaccionó”, denunció la esposa.
Cuando el paciente convulsionó, la familia reclamó la falta de atención médica oportuna, pero, según relatan, la doctora a cargo respondió de manera grosera y sin mostrar empatía. Fue trasladado a sala de choque, donde finalmente perdió la vida.
La familia ha exigido que se investigue el caso y se sancione a los responsables, señalando que este tipo de situaciones no pueden seguir ocurriendo en el hospital. “Queremos que esto termine. No queremos que otra familia pase por lo mismo que nosotros”, afirmaron.