Durante el primer trimestre de 2025, las entidades federativas en México enfrentaron fuertes recortes en el presupuesto destinado a salud, según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). En ese periodo, el Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA) registró una caída del 42.3 por ciento, al pasar de 31 mil 620 millones de pesos en 2024 a 18 mil 939 millones. A esto se suma que los subsidios para la salud pública descendieron 61.5 por ciento, acumulando solo 5 mil 448 millones de pesos, en contraste con los 13 mil 661 millones del año anterior.
Ante esta situación, la diputada local Sughey Torres, del PRI, expresó su profunda preocupación, señalando que Durango es uno de los estados más castigados por estos recortes. “Tenemos hospitales como el Materno Infantil, el 450 y el del Niño completamente saturados”, indicó. “El derecho a la salud es fundamental, no solo para los durangueses, sino para todo el país, y no hay una explicación clara por parte del gobierno federal sobre el destino de estos recursos”.
La diputada insistió en que estos recortes afectan rubros esenciales como salud, seguridad y educación, y criticó la falta de transparencia: “No sabemos hacia dónde se está yendo el dinero. No vemos obras ni acciones concretas que justifiquen esta reorientación presupuestal”.
Torres reconoció la importancia de los programas sociales, pero subrayó que no deben implementarse a costa del sistema de salud, el cual atraviesa una crisis nacional. “Estamos viviendo un momento complejo en el país. Durango no es la excepción”, concluyó, haciendo un llamado a la presidenta de la República para que atienda esta problemática urgente.
Por: Antonio Gaytán
