En Durango, alrededor de 14 mil personas enfrentan la pobreza extrema, una situación crítica que se agrava durante el invierno. Viviendo en casas hechas de cartón y materiales frágiles, estas familias enfrentan temperaturas gélidas e incluso nieve sin contar con los apoyos necesarios. Según Guillermo Juárez Compeán, activista social, el 90% de estas personas no ha recibido ningún tipo de ayuda.
Las bajas temperaturas representan un desafío especialmente grave para las zonas marginadas y las colonias populares. Aunque algunos apoyos llegan, no son suficientes para cubrir las necesidades de toda la población vulnerable. Durante las nevadas recientes en la capital de Durango, muchas familias quedaron desprotegidas al no tener un techo digno o acceso a programas de asistencia.
Retos de la pobreza extrema ante el invierno
Juárez Compeán subraya que las autoridades deben crear estrategias preventivas que aseguren el acceso a apoyos invernales antes de que las bajas temperaturas impacten. Actualmente, las personas en pobreza extrema enfrentan situaciones inhumanas debido a la falta de un plan integral para atender estas emergencias.
De cada 10 personas visitadas en pobreza extrema, al menos nueve no han recibido ningún tipo de ayuda, una estadística alarmante que refleja la insuficiencia de las medidas actuales.
Urgencia de apoyos invernales para Durango
El activista hace un llamado a los gobiernos estatal y municipal para que trabajen en equipo, sin importar colores políticos, y establezcan un fondo de emergencias para atender a los más vulnerables. Tras la desaparición del FONDEN, es vital implementar alternativas que permitan brindar asistencia en casos de emergencia invernal.
Niños, adultos mayores y personas con discapacidad son los más afectados por esta situación. Es fundamental que cada año se destinen recursos suficientes para evitar que las familias sufran las consecuencias del frío extremo. No podemos permitir que los más pobres de Durango sean los olvidados durante el invierno.