Año tras año en cada celebración de los fieles difuntos, el comercio local tiene la esperanza de tener altas ventas y que la economía se recupere. Sin embargo, este 2 de noviembre a las afueras del Panteón de Oriente, se colocaron más de 800 puestos con diferente tipo de productos, aunque la mayoría coincide en que no han logrado vender, aseguran estar peor que el año pasado.
Socorro Herrera, vendedora de tamales, afirmó que no es lo que se esperaba, este año no ha sido bueno porque las ventas son bajas, el año pasado vendieron un poco más.
Leonor Plata Flores, vendedora de agua fresca y dulces tradicionales, expresó que el 1 de noviembre sí tuvo buenas ventas y tiene confianza en que este día será mejor.
Ante esta situación, la seguridad por parte de elementos policiacos ha sido notoria para evitar alguna cuestión de anomalía hacia los comerciantes, la afluencia de quienes acuden a visitar a sus fieles difuntos, genera esperanza en todos y cada uno de los vendedores que buscan salir adelante.
César Rodríguez, comerciante de nuez, cacahuate y fruta de temporada, manifestó que al menos en su negocio si hay movimiento y les ha ido muy bien y esperan que les vaya mejor el 2 y 3 de noviembre.
Aracely Nájera, vendedora de flores, dijo que la economía no ha estado ni buena ni mala, las ventas son regulares pero no pierden la fe, seguramente las personas llegarán más tarde al panteón, no hay que desesperarse.
Por: Víctor Salas