Tras la muerte de su esposo, Norma Sarmiento comenzó a recibir visitas de un hombre que se dice dueño de la casa donde vive ella con sus hijas.
«Viene esta persona y nos saca con lujo de violencia», narró.
La mujer, madre de dos adolescentes, fue violentada en agosto de 2020. Antes del amanecer, la despertaron los golpes que le daban a la puerta de la casa, abrieron y luego la agredieron, contó.
«Fui a poner una denuncia en la Fiscalía, por que me maltrataron; me esposaron, aquí así se me marcó», recordó y tienta la canilla de la mano derecha.
Fueron policías municipales, eso decía el uniforme. Una de las policías, a quien describe como alta y «llenilla» la esposó y agredió.
«Yo soy chaparra y ella estaba alta, entonces hizo lo que quiso, me jaloneó como quiso», denunció.
De acuerdo con la denuncia de Norma, los policías municipales acompañaban a esta persona que se dice propietario de la vivienda.
«El dice que, supuestamente era casa de él y que por eso el venía a desalojarme, pero en ningún momento me presentó un papel», señaló.
Incluso, desconoce el nombre exacto del hombre, pero hay testigos del intento de desalojo, realizado con violencia. Vecinos y amigos de Norma evitaron que se concretara el despojo.
Cartera vencida
La única referencia que tiene la afectada, al responder por qué alguien asegura ser el dueño de su casa, es que cayó en cartera vencida.
El esposo de Norma enfermó del corazón, causa de su fallecimiento en febrero de 2020, pero varios años requirió cuidados.
«Se enfermó mi marido y caímos en cartera vencida porque dejamos de pagar», admitió. Evidentemente, el deudor ya no podía trabajar, y ella se vio obligada a cuidarlo.
Fue en diciembre del año pasado cuando encontró un trabajo y espera llegar a un acuerdo con Infonavit. Aunque el miedo de que alguien vuelva a tratar de desalojarlos no se va. Por eso le regalaron una cadena de acero con la que desde agosto cierra la puerta.
Destacó que el miedo es mayor porque el día que intentaron desalojarla había policías, por lo tanto se cuestiona a quién recurrirá.
«Ellos se supone que están para ayudarlo a uno y, no, resulté agredida yo por ellos mismos», expuso.
Norma interpuso una demanda en la Fiscalía General del estado, contra quien resulte responsable. Aclaró que esto debido a que no conoce los nombres de los policías implicados. Sin embargo, hasta el momento no le han notificado algún avance.
«Ya no duermo porque con cualquier ruidito que pasa que se escucha, o pasan las patrullas con torretas que da la luz hacia adentro, me asusto y me asomo no vayan a venir otras vez; la seguridad pública lo cuidan a uno pero no, hay que cuidarnos de ellos», advierte.