Por: Antonio Gaytán
Aguas negras contaminan ríos en Durango; un análisis de la Comisión de Agua del Estado de Durango (CAED) reveló que solo funciona el 30 por ciento de las sesenta plantas de tratamiento y sistemas lagunares que existen en el estado.
Las aguas negras o residuales son desechos que deben tratarse para evitar enfermedades, pestes, contaminación ambiental y malos olores.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) calcula que las aguas contaminadas causan más muertes que todas las guerras que hay actualmente en el mundo.
La directora de la CAED, Yadira Narváez, comentó que el saneamiento es la parte más desprotegida en todo el país.
Durango está por encima de la media nacional en cobertura de saneamiento por número de habitantes, sin embargo, a nivel país y Durango no es la excepción, los más desprotegidos son el medio rural y las comunidades con menos de dos mil 500 habitantes.
El Gobierno del estado de Durango, que encabeza Esteban Villegas, trabaja en la construcción de lagunas de oxidación porque las plantas de tratamiento han sido un proyecto de poco éxito, una estrategia fallida porque requieren de energía eléctrica.
En el pasado no se tenían disponibles energías alternativas (paneles solares) y las tarifas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) muy altos, las plantas terminaron abandonadas.
La CAED levanta un inventario exhaustivo de cada sistema de tratamiento para pequeñas comunidades y hasta las ciudades más grandes, ver cómo operan.
Se tienen 60 plantas de tratamiento y sistemas lagunares, de las cuales funciona solo un 30%.
Yadira Narváez recordó que la norma de saneamiento cambió este año y se está en pláticas con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para un programa de mejora de este servicio en los 39 municipios del estado de Durango.
Se hará una reingeniería de cada uno de los municipios, en cada una de las lagunas de oxidación y de las plantas de tratamiento, se invertirá para dotarlos con energías alternativas para mejorar y garantizar el saneamiento, para evitar la contaminación de ríos, arroyos y sobre todo la salud de la población.
El presupuesto 2023 para la CAED oscila por los 60 millones de pesos, prácticamente similar a este año donde se ejercieron 54 millones de pesos.
Un recurso limitado, reconoce la directora de la CAED, pero se integrará un programa de operaciones prioritariamente en comunidades de alta y muy alta marginación.
Además, con la gestión que realiza el gobernador Esteban Villegas, existirán otras líneas de acción con otros programas como el Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) que en coordinación con los municipios se multiplicarán.
«Sin ocurrencias, como ha pedido el gobernador, serán tiros certeros, en qué sentido: ¿que requiere el municipio? ¿cuál es el dictamen de su mayor problemática en agua y saneamiento? y la línea será coordinarse para avanzar más y en orden», concluyó.
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