Tras haberse confirmado por parte de la autoridad sanitaria a nivel nacional la cancelación, de la Norma Oficial Mexicana (NOM), que regula las técnicas de observación obligatorias frente a la picadura de alacrán, el director de Salud Pública Municipal, Juan Esteban Aguilar, emitió su punto de vista y asegura que en Durango sí hay impacto y seguramente es algo de lo que nos estaremos quejando más adelante.
Se ha manifestado que la decisión tomada deja en la incertidumbre de lo que ocurrirá para enfrentar los casos. Si bien los números indican que las cifras de ataque de alacrán a personas van a la baja, aún se contabilizan por miles, de acuerdo con cifras oficiales, en todo el 2023 se registraron 302 mil 996 casos acumulados de intoxicaciones por picadura de alacrán en el país. A la semana epidemiológica 26, de 2024 (al 29 de junio pasado), son 153 mil 128 los casos.
El doctor Juan Esteban Aguilar expresó que quienes estuvieron generando la asesoría en este tema y tomaron la decisión de desaparecer la NOM que regula las técnicas de observación obligatorias frente a la picadura de alacrán, perdieron de vista muchas situaciones de lugares que tienen afectaciones por este tema y con la intención de optimizar el recurso en otras áreas se va limitando y tiene como consecuencia mucha incertidumbre.
“En Durango sí hay impacto y seguramente es algo de lo que nos estaremos quejando más adelante. Esta eliminación de la NOM nos pega y bastante, vamos a estar limitados con el biológico o suero antialacránico aunque nunca se ha escaseado afortunadamente, hay que decir que en el tema de medicina ningún recurso es excedente”.
Es de vital importancia mencionar que las NOM son guías que definen los criterios para prevenir, diagnosticar y tratar enfermedades catalogadas como problemas de salud pública.
Sin embargo, hay que recordar que tras el debate sobre la eliminación de las NOM el año pasado, Hugo López-Gatell dijo que en México se garantiza la atención médica integral para 35 mil enfermedades, por lo tanto, las normas ya no son necesarias.
Por: Víctor Salas