Por: Ilse Gaytán

Las mujeres en México pasan por un pisoteo de sus derechos en comparación a los hombres (menor paga, despidos por embarazo, acoso, etcétera), pero las privadas de su libertad afrontan un peor escenario.

Al menos en el estado de Durango se se estima que más de la mitad de las detenidas aún no se les dicta una sentencia para empezar a cumplir su pena, según el Censo Nacional de Sistemas Penitenciarios Estatales (CNSPE) 2021 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

A través de Instituto de Evaluación de Políticas Públicas del Estado de Durango (Inevap) se dio a conocer un comunicado sobre la situación de las mujeres encarceladas, donde el estado presenta un panorama critico.

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Específicamente, de las 251 mujeres encarceladas 155 se encontraba sin sentencia, de las cuales 69 (44.5 por ciento) tienen entre seis a 12 meses esperando y 39 mujeres (25.1 por ciento) desde hace más de 12 meses, es decir, 1 de cada 4 mujeres sin sentencia tiene más de un año esperándola.

Asimismo, Durango presenta el mayor numero de reingreso con 1 de cada 5 mujeres (22.7 por ciento) que ingresó a un centro penitenciario ya había cumplido una sentencia anterior.

Además, se observa la relación de mujeres encarceladas con las adicciones: el 42 por ciento de las mujeres que pertenecen a la población penitenciaria duranguense tiene alguna adicción.

Cabe recordar que la cárcel debe ser un espacio para lograr la reinserción, sin embargo, son mujeres vulnerables con procesos legales lentos y complejos.