El temor de Estados Unidos es el ingreso de ganado ilegal de Centroamérica a México, animales que llegan hasta las engordas del norte del país y que representan un alto riesgo de diseminar el Gusano Barrenador del Ganado (GBG), comentó el presidente de la UGRD, Rogelio Soto Ochoa.
Recientes estudios de especialistas de la Universidad Autónoma de México (UNAM) indican que el contrabando de ganado pudiera acelerar la propagación de mosca Cochlimoyia hominivorax; no existe una cifra precisa, pero se estima que más de 700 mil reses ingresan ilegalmente por la frontera sur.
En el programa “Aquí hay Campo” se analizó la decisión del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) de cerrar la frontera a la exportación del ganado mexicano como sanción por una vaca con larva del GBG en el estado de Chiapas; medida que afecta a los estados exportadores.
Los estados exportadores de ganado en pie son: Sonora, Chihuahua, Coahuila, Durango y Tamaulipas.
El presidente de la Unión Ganadera Regional de Durango (UGRD) pidió a los productores mantener la calma y no caer en la desinformación de esta situación, los exhortó a no vender sus becerros en este momento porque el valor bajo un 50 % en comparación al precio que se estaba pagando.
Un becerro que se estaba pagando en 18 mil pesos, ahorita lo pagan en 9 mil pesos, lo mejor es esperar a que se abra la frontera y que el precio se recupere, porque se va a recuperar; hay confianza que sea cuestión de semanas para retomar la exportación a los Estados Unidos.
Rogelio Soto destacó el buen trabajo que está realizando el Gobierno de México en sus negociaciones con USDA, ya se están tomando medidas urgentes como fue la dispersión de mosca estéril de GBG en la zona de Catazajá, Chiapas, donde se detectó la vaca no mexicana con larva de esta plaga.
Además, se trabaja en un nuevo protocolo sanitario que deben cumplir los productores, acopiadores y exportadores, pero también las empresas dedicadas a la engorda de ganado; porque el cierre de la frontera no solo debe preocupar a los estados exportadores, también al resto del país porque.
El cierre de la frontera saturaría el mercado nacional y caería el precio del ganado bovino, todos pierden.
“Se los dije hace muchos años a los compañeros de los estados del sur, a ustedes también les deben de importar los estados sanitarios, pero no nomás del norte, sino de su propio estado, porque este es un equilibrio que tenemos; se habla de cerca de 800 mil cabezas de ganado ilegal que entra a México y va a parar a las engordas del sur y del norte del país; ese es el temor de Estados Unidos”, apuntó.
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Por: Antonio Gaytán
