Golpes de calor mataron ganado en Durango, consecuencia de la peor sequía de los últimos 80 años y temperaturas máximas récord, condiciones extremas nunca antes registradas en este estado, comentó el presidente de la Unión Ganadera Regional de Durango (UGRD), Rogelio Soto Ochoa.
Cuestionado sobre la condición actual de los bovinos, el presidente UGRD respondió que regulares, “no estamos bien”.
Según el Servicio de Cambio Climático de Copernicus, las temperaturas medias mundiales llevan 12 meses consecutivos rompiendo récords, es decir, el calor aumentó mes con mes.
Altas temperaturas que, en el caso de Durango, en 2023 y en lo que va del 2024, han causado estragos en las actividades agropecuarias, el año pasado no hubo cosechas de temporal, se perdieron los pastos, se secaron los bordos y las presas están casi vacías.
“En el mes de mayo fueron los calores, que yo, por primera vez en mis 57 años de vida, vi morir vacas por golpes de calor, así de ese tamaño estuvo la sequía”, expresó el líder Rogelio Soto, al mencionar que el escenario, afortunadamente, está mejorando.
Se presentaron lluvias en el mes de junio, hace siete años no se registraban precipitaciones en ese mes en el estado de Durango, lo que genera ánimo en los productores porque ya empieza a verse brote de pastos en los agostaderos.
A pesar del escenario adverso, la ganadería duranguense está avanzando gracias al estatus sanitario que permite exportar ganado en pie a los Estados Unidos; este año se estima una exportación de 200 mil becerros y vaquillas, con precios récord en frontera.
La ganadería sigue siendo rentable y una de las actividades que más aporta a la economía del estado de Durango; sin embargo, reitera Rogelio Soto que deben seguir adaptándose al cambio climático, ser más productivos; ser eficientes para elevar la parición de bovinos.
“Es mejor tener 10 vacas que paran; y no 20 vacas que comen, pero que menos de la mitad dan becerros; tenemos que concientizar a los ganaderos, sobre todo en los ejidos”, concluyó.
Por: Antonio Gaytán