Por: Silvia Ornelas
La diputada local de Morena, Marisol Carrillo, ante las especulaciones sobre su expulsión del partido, argumentó que adelante y seguirá repitiendo que no es una franquicia, ni un camarilla, ya que se pasan por encima los decretos del presidente.
«Morena es de todos, es del pueblo; ahora resulta que porque les incomodamos por unos terribles y desastrosos resultados, ahora sí nos responsabilizan», precisó.
Mencionó que Morena no es de nadie, sino que es del pueblo, y se seguirá quedando en el partido.
«Ahora sí, que le hagan como quieran, no son los que deciden, yo asumo mi responsabilidad y no quiero perjudicar absolutamente a nadie; también sería perjudicar a una Junta de Gobierno, pero pues sigamos sacándonos los ojos», concluyó la legisladora morenista.