Muerte de ganado por sequía, prácticamente es inevitable este 2024; solo en el municipio de Durango, la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (SAGDR), ya reporta la pérdida de 700 vacas por falta de agua y alimento.
El estado de Durango es ganadero, con más de 1.2 millones de cabezas, de las cuales, alrededor de 300 son vacas lecheras; el resto de doble propósito (leche y carne).
Sector que enfrenta condiciones adversas por la falta de lluvias desde octubre de 2022 y que, en el primer semestre de 2024, se tornan más críticas por las altas temperaturas, la escasez de agua y el poco, muy poco pasto en los agostaderos.
«Es una problemática muy fuerte que tenemos; el próximo martes, el gobernador Esteban Villegas iniciará el programa emergente de atención a la sequía», expresó.
En las comunidades donde hay desabasto de agua, tanto para consumo humano como para el ganado, se prestaron pipas para transportar el vital líquido; también se entregará suplemento alimenticio que ayudará a mitigar los efectos de la sequía y en la economía de las familias que se dedican a la agricultura y la ganadería.
Chuy López menciona que la sequía es general, sus estragos se sienten en los 39 municipios.
Recordemos que, históricamente, el mes de mayo es sumamente complejo por el calor intenso que golpea a la entidad duranguense; es necesario ir generando soluciones más de fondo con la instalación de equipos fotovoltaicos para bombear agua por líneas de conducción a las zonas donde los animales están pastando.
«Ya hay muerte de ganado, solo en el municipio de Durango van más de 700 cabezas que han muerto, estamos en un análisis en el resto del estado, dar una cifra exacta del estado, todavía no lo tenemos; pero lo más fuerte inicia este mes», apuntó.
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Por: Antonio Gaytán