Durango, Dgo.- «A hospitales de Durango cada vez es más frecuente que lleguen bebés indígenas que por hambre llegan en la última etapa, parar tratar de salvar su vida, pero desafortunadamente, muy pocos bebés logran vivir», señaló la diputada Gabriela Hernández López, tras el fallecimiento por deshidratación e inanición de una bebé de siete semanas de nacida, del municipio de Mezquital.
“Necesitamos que haya un programa especial de los tres órdenes de Gobierno para atender la desnutrición e inanición. Se debe hacer un gran esfuerzo para que, las mujeres, desde su embarazo, puedan comer los nutrientes que necesitan para tener bebés sanos y así, evitar los fallecimientos”, agregó la diputada.
La legisladora reconoció que la pobreza y la falta de garantías para el cumplimiento de los derechos humanos, como es el acceso a la salud y la alimentación, se resienten más en las zonas indígenas.
Se reciente más porque las dificultades para que las mamás puedan conseguir el alimento son el triple de lo que hay que hacer en la ciudad. En la zona indígena, las madres deben caminar por horas, para llegar a donde pueda haber alguna tienda. Por eso, la diputada considera necesario que haya más infraestructura y carreteras, para que las familias tengan lo necesario y puedan movilizarse, para llegar a tiempo a un hospital o para adquirir su comida.
“El discurso tiene que pasar a la acción y a los resultados, para que los bebés indígenas, las niñas y los niños de la zona indígena, y de las zonas serranas, tengan una mejor atención desde la gestación y durante todo su desarrollo”.
Gaby Hernández, adelantó que, con miras a la asignación del presupuesto del Estado, presentará una propuesta para que se integre un fondo especial para atender la desnutrición en la niñez y las mujeres embarazadas, de la zona indígena, concluyó.