- Más de 200 desplazados, la mitad son niños, viven en la Casa de la Comunidad
Por: Antonio Gaytán
Alrededor de una docena de comunidades de la sierra, en la zona limítrofe Durango-Sinaloa, se han convertido prácticamente en pueblos fantasma debido a la migración de sus habitantes que salen huyendo de la violencia que ejercen los grupos criminales, “cada localidad tenía unas 300 personas y hoy, varios pueblos están solos”, manifestó Alfreda Alvarado Ortiz, una de las desplazadas.
La migración se ha dado de manera parcial o total en las comunidades de Balontita, Camarones, Las Cañas, La Yerbabuena, Los Ángeles, La Ventana, Norias, San Francisco de Lajas y San Bernandino de Milpillas, municipio de Pueblo Nuevo, Durango; así como de Los Brotos, Plomosas, Agua Fría y La Rastra, municipio El Rosario, Sinaloa.
Un grupo de más de 200 desplazados, la mitad son niñas y niños, llegaron a la ciudad de Durango con la intención de vivir, actualmente algunos habitan en la «Casa de la Comunidad», otros rentan alguna casita, pero están sin empleo y sufren de graves carencias; ante esta condición acudieron al Congreso local para solicitar ayuda, requieren vivienda, trabajo y escuela para sus hijos.
En la «Casa de la Comunidad», ubicada en la colonia Azteca, habitan 90 familias sin camas y sin cobijas, duermen en el suelo, requieren ropa, calzado y comida; no tienen trabajo para su sustento.
Actualmente las niñas y niños, reciben clases en una casa particular en la colonia Justicia Social sin libros, sin mobiliario y todos apretados; a cargo de la maestra Leonila Cervantes (sin cobrar).
Se prevé que llegarán más familias huyendo de esa región donde los grupos criminales van a las comunidades y tiran balazos a las casas para asustarlos, intimidación que sólo cesa cuando llegan fuerzas militares pero cuando se retiran regresa esa presión, incluso con mayor fuerza, por esta razón no piensan volver a sus comunidades porque ya son muchos meses con esta violencia.
Las familias fueron escuchadas por una comisión de diputados locales y funcionarios de primer nivel del Gobierno del estado de Durango para apoyarlos.
