Por: Brenda Maurer
El mantenimiento de la red carretera rural y alimentadora del estado de Durango, es una acción que realiza la federación de manera conjunta con el Gobierno estatal. En este caso la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) está atendiendo 800 kilómetros de los 10 mil que tiene esta red, para lo cual se tiene un presupuesto para este año de 340 millones de pesos, señaló el director del centro SCT, Ángel Sergio Dévora Núñez.
Explicó que se debe entender que las vías rurales tienen un deterioro muy intenso derivado del tránsito de camiones pesados como los que transportan material de minería o trozos de madera porque estos caminos son para transito ligero.
Dentro de los tramos prioritarios que se atienden está el de la Flor–Mimbres, Durango-La Flor; también Las Espinas-Taxicaringa, además del Ramal a las Espinas. En el tramo San Miguel de Cruces se hizo una reparación a 71 kilómetros.
Abundó en que para la zona de la Sierra en lo referente al municipio de Topia también se hicieron reparaciones en el Valle de Topia, en este caso son tramos que están en zonas muy alejadas de las comunidades. “La realidad es que sí estamos visualizando cuales son los caminos que tienen más deterioro con el objetivo de tener equilibrado el mantenimiento de esta red”.
Finalmente, comentó que los trabajos los hacen en dos etapas, un primer paquete que cubre alrededor de 180 millones de pesos con los que se atienden 400 kilómetros e inician los trabajos de la segunda etapa con lo que se alcanzaría la meta de 800 kilómetros.