Lamentablemente, las tortillerías informales siguen operando sin freno. De hecho, se estima que son alrededor del 30 por ciento de las existentes, pero no hay certidumbre; las autoridades nos piden que les entreguemos una lista de los informales, pero lógicamente no les hacen nada, expuso Antonio de la Torres Carlos, presidente de la Unión Nacional de la Industria de la Masa y la Tortilla.
“Realmente los afectados siempre somos los que trabajamos en la formalidad. Confiamos en una Norma Oficial Mexicana, que la Unión Nacional propusimos; pero les dio la ocurrencia de meter el maíz transgénico, lo que a nosotros nos apuraba en el comercio informal y ya no se tocó el tema, ya que no tenemos certeza de que usen las materias primas adecuadas que garanticen la salud del consumidor”, señaló.
El entrevistado mencionó que el mayor porcentaje de las tortillerías informales se presenta en colonias de la periferia, pero realmente están en todos lados. “La gente nos pregunta por qué está hasta cinco pesos más barato el kilo de tortilla en algunos lugares, pero lo que pasa es que al ser informales los costos de producción son menores para ellos”, dijo.
“Las tortillerías formales tenemos que pagar seguros, salarios y otras cosas que nos pegan mucho, mientras que ellos no pagan lo que implica el grueso de la producción de la tortilla”, concluyó.
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Por: Brenda Maurer