Durango, Dgo.- Con sentido y honesto mensaje de solidaridad a las familias de los agentes de la Policía Estatal caídos en el cumplimiento de su deber, y con la convicción de dar con los responsables de este artero crimen, el secretario de Seguridad Pública del Estado, Francisco Javier Castrellón Garza, se dirigió a los presentes en el homenaje luctuoso organizado por esta dependencia a los fallecidos José Cruz González y Othoniel Almanza Olvera.
La mañana de este viernes las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública fueron el escenario de la ceremonia luctuosa en la que familiares, amigos y compañeros de profesión dieron el último adiós a Othoniel y a «Crucito», quienes perdieron la vida la madrugada del jueves pasado al ser emboscados por sujetos armados en el municipio del Mezquital.
El Secretario de Seguridad Pública se dirigió a los familiares de estos agentes para bridarles toda su solidaridad y apoyo, reconoció que el ser policía es una difícil y complicada profesión, que pocas veces es entendida y nulas veces reconocida por la sociedad, por lo que expresó que seguirá, como hasta ahora lo ha hecho, insistente, con el apoyo del gobernador José Rosas Aispuro Torres, en que mejoren las prestaciones, equipamiento, profesionalización, y sobre todo el reconocimiento que pocas veces se recibe de la sociedad.
Por su parte, el Subsecretario Operativo de esta dependencia, Juan Rafael Carreón Garrido, coincidió con el Secretario de Seguridad Pública, al considerar esta labor como una de las más demandantes y que a veces no se tienen los resultados que se pretenden, como en este caso en que perdieron la vida dos elementos de la Policía Estatal.
También participaron en las diferentes guardias de honor, además de los agentes de la Policía Estatal, los elementos de la Policía Investigadora de Delitos, del Ejército Mexicano, de la Policía Federal y la Fiscalía General de la República.
Durante la ceremonia el inspector general de la Policía Estatal, Alejandro de Lara Estrada, dirigió unas palabras en nombre de todo el personal, en las que lamentó el deceso de sus compañeros que justo se daba en la plenitud de sus vidas, siendo muy claro que su partida se da cuando contribuían con su talento, experiencia y energía a construir una sociedad de paz y prosperidad para todos.