Durango, Dgo.- Durante estos tiempos en los que se vive una marcada descomposición del tejido social, cuando se cree haberlo visto todo, sorprende lo ocurrido en popular colonia de esta ciudad, donde un niño, de apenas ocho años, quiso violar sexualmente a otro de siete.
Claro que por lo delicado del asunto y para no violentar los derechos de los involucrados, no proporcionaremos datos que propicien su identificación, solo diremos que los pequeños fueron sorprendidos al interior de un vehículo, cuando estaba a punto de consumarse el hecho.
Luego de hacer el descubrimiento del incidente, en el que los protagonistas son dos amiguitos, los familiares del que presuntamente iba ser ultrajado, se disponían a presentar la denuncia correspondiente en la Fiscalía General del Estado (FGE).
Sin embargo, algunos vecinos consideraron que el tema, más que tratarse desde el ámbito policíaco, debe hacerse en lo social, psicológico, familiar y educativo, porque sin lugar a dudas, se relaciona precisamente con la pérdida de los valores y descomposición del tejido social, pero tal vez por los malos ejemplos que sus mayores les dan.