Tiene una vida complicada, sin embargo, no se detiene y busca la manera de salir adelante a pesar de las adversidades.
Se llama Elvira Gorgonio y cuenta con 78 años de edad, desde hace cuatro años, se dedica a cocinar frijoles y los vende para sobrevivir, a veces no se venden porque la situación económica es difícil en las familias.
Su casa es muy humilde, el techo de lámina donde duerme está dañado, se mete el agua de lluvia y es como si durmieran afuera.
Gonzalo Guzmán, es pepenador, cuando tiene recurso le compra cinco pesos de frijoles a doña Elvira, por lo que dijo que los hace rendir para poder comer todo el día.
Ramón Soto, de 32 años de edad, es discapacitado, hijo de Elvira y desea una silla de ruedas en buen estado, una televisión porque la que tiene no prende y requiere un colchón que no sean solo resortes.
Se espera tener respuesta de alguna autoridad, tanto del DIF municipal y estatal para ayudar a que la vida de esta familia humilde pueda cambiar.
Ellos viven en calle San Juan de Letrán número 143, de la colonia San José III.