Pedro Heber Mancinas Haros está desaparecido desde hace dos años . Su mamá Lucía Haros no ha perdido la esperanza de encontrarlo vivo o muerto.
El joven tiene ahora 24 años, se fue a Estados Unidos, primero a California, luego a Utah, recuerda Lucía . «Ya tenía mucho tiempo el ahí, estaba con unas personas».
Nadie sabe que ocurrió con él, solo se sabe que vivía con amigos, los cuales no han proporcionado alguna información.
La última vez que se comunicaron con Pedro, se encontraba en Utah, pero le dijo a su mamá que se cambiaría a casa de un amigo, con el cual nunca llegó .
«Eso es muy duro, no se lo desea uno ni a su peor enemigo», dice Lucía, quien admite que mantiene el pensamiento de que su hijo está vivo, «pero él no era de esos que dijeran no le voy a marcar a mi familia, no, siempre estaba marcando».
La familia lo ha buscado en diferentes instancias de Estados Unidos, y por dos años no han encontrado alguna respuesta.
«Mi hija se comunicó mucho, de hecho en las cárceles y no nunca lo encontraron», narró la madre. Incluso buscaron a Pedro en anfiteatros y no fue detectado. «Le dieron una lista de varios pero el no viene, y mi hija habló también donde llevan todos los cadáveres y no tampoco apareció».
Debido a esto, Lucía confía en que su hijo, está vivo, pero como no se ha comunicado piensa que no se encuentra bien.
«Si estuviera con vida, bien, libre, el ya se hubiera comunicado», dice.
Tras dos años de búsqueda y espera, el deseo es saber si vive o si ha fallecido. «Quiero saber si está con vida o está muerto pero no no ha aparecido que este muerto tampoco allá», comentó Lucía.
Luego de que Pedro desapareció, la familia se comunicó a la embajada de Estados Unidos cuyo personal aseguro que se comunicarían en cuanto tuvieran información, pero hasta el momento eso no ha sucedido.
La familia compartió imágenes del joven, con la «esperanza» de que alguien aporte alguna información útil para saber en donde está.
Lucía anhela que su hijo se comunique. «El sabe lo que es para nosotros», comenta mientras recuerda que el joven le llamaba casi todos los días desde que se fue a Estados Unidos, de «mojado».
Lucía hace un llamado para que la ayuden en la búsqueda e su hijo, en la cual ya no encuentra que camino seguir.
«Quisiera que nos ayudaran para encontrarlo como fuera vivo o muerto», afirmó.
Ora todos los días para poder encontrarlo, le pide a «San Judas Tadeo, a la virgen, al Sagrado Corazón de Jesús , que si está con vida que lo ayude y que tengamos una señal de vida».
Lucía pide ayuda para encontrar a Pedro, a quien por cariño le decían Peyo. «Lo estamos esperando toda la familia, lo queremos mucho y sería lo mejor para nosotros que regrese», comentó la mamá, que durante dos años no ha dejado de buscar a su hijo desaparecido en Estados Unidos.