“A pesar de lo que estamos viviendo, gente sigue incrédula y burlándose”
04/05/2020 - Hace 5 años en Guadalupe Victoria“A pesar de lo que estamos viviendo, gente sigue incrédula y burlándose”
Por: Perla Ríos
Guadalupe Victoria, Durango.- «En esta tarde triste como el ánimo de nuestro pueblo, me gustaría hacer algunas reflexiones», expresó la Doctora, María de la Luz Avalos García, directora del Centro de Salud de Servicios Ampliados (CESSA).
“Día tras día ha sido una lucha constante, tratando de generar conciencia en cada uno de ustedes, escucho diversas versiones, unas más descabelladas que otras, gente de aquí del pueblo y de los alrededores, que a pesar de lo que estamos viviendo, siguen incrédulos, burlándose y sin respetar las indicaciones de quedarse en casa”, manifestó a Directora.
Además agregó que «es cierto, no somos héroes, ni pretendemos serlo, somos personas como tú, que salimos a trabajar con el miedo a no regresar o de contagiarnos y contagiar a nuestros seres queridos, a pesar de los cuidados que tenemos», manifestó.
Están luchando porque esta situación termine pronto, tratando en todo momento respetar el derecho a la privacidad que todo paciente tiene, animando a los que se encuentran aislados y llorando cada vez que alguno de ellos se complica.
Sin poder dormir, ni de día, ni de noche, porque a pesar de contar con médicos que los apoyan, entiende perfectamente que la confianza de la población está puesta en ella, en ocasiones rebasada por los cientos de mensajes, llamadas y búsquedas a su propia casa, tratando de atenderlos de la mejor manera.
Haciendo equipo con el presidente, comisariado y voluntarios que los apoyan, recibiendo críticas pero también bendiciones y buenos deseos.
Apoyó y compadeció cada uno de los traslados que tuvo de pacientes que se complicaron, pero también llorando de felicidad cuando ellos regresan en buenas condiciones.
Con el corazón triste y apachurrado cuando sabe que ya no van a regresar los que desgraciadamente pierden esta batalla.
Compartió imágenes muy íntimas de lo vivido hasta el día de hoy, con la esperanza que por fin la población entienda y se quede en casa. Con la esperanza de que la última fotografía que tengan de un ser querido, no sea el de una ambulancia alejándose en una noche triste y obscura.
