Guadalupe Victoria, Durango.- Según los datos correspondientes de las proyecciones de la población de México y sus entidades proporcionados por el Inegi y el Consejo Nacional de Población (Canapo), la esperanza de vida en Durango es de 75.1 años, porcentaje estimado en hombres y mujeres para los años 2020 al 2070.
Al igual que sucede en otras entidades de México y en otros países del mundo, las mujeres en Durango viven, en promedio, más que los hombres. A pesar de la caída en la esperanza de vida durante la pandemia, como ocurrió en todo el mundo, el indicador se recuperó: en 2023, la esperanza de vida al nacer era de 78.2 años para las mujeres duranguenses y de 72.1 para los hombres.
Con base a estos datos de mortalidad proporcionados anteriormente, te daremos a conocer algunos hábitos y conductas sugeridas por los Institutos Nacionales de Salud que, basados en sus estudios e investigaciones realizados, demuestran que tener conductas saludables puede ayudar a que te mantengas sano, activo y te beneficie a aumentar la esperanza de vida propia y la de tus seres queridos.
El ejercicio regular, una dieta vegetariana, evitar el tabaco y el alcohol, y mantener un peso balanceado son los más comunes: «Si tuviera que clasificar las conductas en términos de prioridad, diría que el ejercicio es la cosa más importante asociada con una vida más larga «, dice el Dr. Luigi Ferrucci, geriatra de los NIH, que supervisa las investigaciones sobre envejecimiento y salud.
«El ejercicio es especialmente importante para alargar la expectativa de vida activa, que es la vida sin enfermedades y sin discapacidad física y mental o problemas de razonamiento», añadió.
Aun los adultos mayores más frágiles pueden beneficiarse al hacer actividad física regular. Un estudio financiado por los NIH incluyó a más de 600 adultos de entre 70 y 89 años con riesgo de discapacidad. Fueron asignados al azar a un programa de ejercicio moderado o a un grupo de control sin ejercicio estructurado. El grupo de ejercicio llegó, en forma gradual, a una actividad física de 150 minutos semanales. Esto incluía caminatas rápidas, ejercicios de fuerza y equilibrio, y ejercicios de flexibilidad.
«Después de más de dos años, el grupo de actividad física tenía menos discapacidad, y quienes sufrían una discapacidad lo hacían durante menos tiempo que las personas en el grupo de control,» explica Bernard. La combinación de diferentes tipos de ejercicio -aeróbico, de fuerza, de equilibrio y de flexibilidad-— es importante para un envejecimiento saludable», señaló.
Por: Edsson Zamarripa