Carmelo Fernández Padilla, presidente de la Rama Nacional de Producción de Frijol de la Confederación Nacional Campesina (CNC), aseguro que son los hijos de los productores que viven en el extranjero quienes apoyan económicamente a sus padres y evitan que las deudas los consuman.
“La gente se pregunta cómo le hacen los productores del campo para sobrevivir y la respuesta es sencilla”, dijo.
Agregó que, “las remesas han subido, lo que significa que son los hijos de Estados Unidos los que están respondiendo a las necesidades de los campesinos”.
Dichas remesas son utilizadas por los productores para pagar deudas, mantener a la familia e incluso para pagar los gastos que conlleva la temporada de siembra.
Pues los paisanos son los que están sosteniendo a las familias, a los padres y a los hermanos, dijo el líder campesino.
Los hijos envían sus dólares esperando que en diciembre se vea redituado el esfuerzo, ya que creen que al levantarse la producción de maíz y frijol se podrá recuperar la economía de la familia y no siempre es así.
Ya que puede verse afectada porque la cosecha no fue la esperada o porque el pago que reciben por kilogramo es muy bajo.
Ante esto, hay muchos casos donde productores prefieren pasar sus tierras y dejar de trabajarlas.
Debido a que al final del año se dan cuenta que fue más lo que se endeudaron que lo que lograron recibir por lo cosechado.
Por ello cada vez hay más casos, donde los hijos que radican en EU optan por pedirle a sus padres que dejen las tareas del campo.
Para luego encargarse ellos de los gastos del hogar, finalizó Fernández Padilla.