Científicos detectan un misterioso mensajero del cosmos
12/02/2025 - Hace 5 horas en InternacionalCientíficos detectan un misterioso mensajero del cosmos
Un equipo internacional de científicos anunció este miércoles la detección de un extraordinario y esquivo neutrino, una diminuta partícula subatómica que voló a una velocidad cercana a la de la luz hacia un detector submarino frente a la costa de Sicilia y que transportaba alrededor de 30.000 veces la energía generada por el mayor acelerador de partículas del planeta.
La observación, revelada en la revista Nature, reveló el neutrino de mayor energía jamás detectado, lo que desató especulaciones sobre el cataclismo astrofísico que pudo haberlo lanzado hacia la Tierra.
astrónomos utilizan telescopios que observan la luz de las estrellas
De la misma manera que los astrónomos utilizan telescopios que observan la luz de las estrellas para explorar y explicar el universo, los científicos han instalado telescopios gigantescos en las profundidades del agua y el hielo para medir los neutrinos. Estos mensajeros cósmicos pueden viajar sin ser molestados a lo largo de grandes distancias y llevar información sobre los misteriosos eventos de alta energía que los generan.
“Es increíble, ¿verdad?”, dijo en una conferencia de prensa el físico de neutrinos Paschal Coyle, miembro del equipo KM3Net que realizó la investigación. “Existen objetos en el universo que pueden acelerar partículas a energías tan extremas. Cómo lo hacen es algo que todavía no entendemos completamente. Por eso, cada pieza de información que nos dé una pista sobre los procesos involucrados en alcanzar energías tan altas es uno de los principales objetivos de la astronomía”.
La detección de un neutrino de energía sin precedentes despertó el interés de la comunidad científica el fenómeno podría estar relacionado con eventos cósmicos extremos como el choque de rayos cósmicos con el fondo de microondas del universo o la actividad de un agujero negro supermasivo
Los neutrinos no pesan casi nada y no tienen carga. No son nada exóticos, se generan por reacciones de fusión nuclear en el interior del Sol. Billones de ellos recorren nuestros cuerpos constantemente, sin que nadie lo note.