NASA realiza pruebas en campos de lava para su próxima misión a Marte
15/08/2019 - Hace 5 años en InternacionalNASA realiza pruebas en campos de lava para su próxima misión a Marte
Antes de la próxima misión a Marte, en 2020, la NASA prepara en los campos de lava islandeses la continuación del trabajo iniciado por Curiosity, un robot que explora desde 2012 el planeta rojo buscando de señales de vida. El campo de lava de Lambahraun, a los pies del glaciar Langjökull, el segundo más grande de Islandia y situado en el este de la isla, fue el terreno de juegos de una quincena de científicos e ingenieros de la agencia espacial estadunidense durante tres semanas de julio.
“Es un muy buen análogo para la exploración de Marte y para aprender a manejar róvers” en terreno marciano, destacó desde el lugar Adam Deslauriers, responsable de espacio e instrucción de Mission Control Space Services.
La NASA recurrió a esta empresa canadiense, con sede en la Ottawa, para que pruebe un prototipo de astromóvil en el marco del proyecto SAND-E, de navegación semiautónoma para los entornos de rocas clásticas. Este pequeño vehículo eléctrico, de paredes blancas y chasis naranja, se desplaza gracias a cuatro ruedas motrices impulsadas por dos motores laterales, que funcionan como una excavadora gracias a 12 pequeñas baterías de vehículo disimuladas en su interior.
“Este róver es fundamentalmente indestructible”, aseguró Adam Deslauriers. “Los que tenemos en Marte y la Luna serían mucho más sensibles al medio ambiente y a las condiciones de Islandia. Un róver lunar no está para nada preparado para la lluvia”, asegura.
El róver, equipado con captores en 3D, una computadora, una cámara con dos objetivos e instrumentos científicos, puede ser pilotado a distancia o con ayuda de un control remoto, y mueve sus 570 kg a 20 centímetros por segundo.
El robot recopila y clasifica los datos de su entorno gracias a las imágenes que envía a los ingenieros, que se encuentran en un remolque a varios cientos de metros de la máquina. A continuación, estos compilan los datos y los transmiten a los científicos, confinados en una tienda acoplada al remolque. Simulan así cómo se enviarían los registros de Marte a la Tierra.
Las campañas analógicas planetarias permiten a la NASA probar el material y los procedimientos, además de a quienes van a ejecutarlos, en unos entornos extremos que modelizan aquellos a los que se enfrentarán en el espacio los robots o los austronautas. Mission Control regresará a Islandia para realizar nuevas pruebas robóticas el próximo verano boreal, antes del lanzamiento de la misión “Mars rover” de la NASA, previsto entre el 17 de julio y el 5 de agosto de 2020.