Greta Thunberg lideró una acción de protesta el lunes, bloqueando las principales entradas del Parlamento sueco junto a decenas de activistas medioambientales.

Su objetivo: destacar la crisis climática y la inacción política que consideran responsable de la destrucción de los sistemas de sustento de la vida y la pérdida de vidas humanas.

En una declaración a Reuters, Thunberg expresó la urgencia de la situación, insistiendo en que «esto tiene que acabar» y acusando a los políticos de no tomar medidas adecuadas frente al calentamiento global.

Aunque Thunberg se ha convertido en un símbolo del activismo climático juvenil a nivel mundial, sus protestas en Estocolmo rara vez han involucrado el bloqueo de las entradas al parlamento.

A pesar de que algunas entradas del edificio permanecieron abiertas durante la protesta, Thunberg y sus compañeros manifestantes se mantuvieron firmes en su posición, argumentando que la falta de acción de los políticos exige la adopción de enfoques nuevos y más audaces para hacer oír sus voces.

Thunberg, quien el año pasado enfrentó detenciones y expulsiones de protestas en varios países, incluidos Suecia, Noruega y Alemania, continúa siendo una fuerza impulsora en el activismo climático.