Lingen, Alemania.- El gobierno de Alemania está por dar un gran brinco en su política de energía. Después de 35 años, tres plantas impulsadas por reactores nucleares serán cerradas dentro del país el próximo sábado.

A partir del día de mañana, Alemania ya no contará con plantas de energía nuclear en su territorio, dando con esto fin a una era y modelo que prometía ser el futuro de la energía sustentable.

La decisión tomada por el gobierno del país surge como el cierre de un movimiento que inició hace más de una década. Tras lo ocurrido en la planta de Fukushima en Japón en el año 2011, la sociedad alemana comenzó a preocuparse respecto a este tipo de energía. Como consecuencia, distintos grupos activistas comenzaron a presionar para la eliminación de estas plantas. Meta que han conseguido.

Sin embargo, el cambio supone nuevos desafíos que tendrán que afrontar. El principal problema ahora es qué hacer con los residuos nucleares. Estos no pueden ser simplemente eliminados, ya que requieren de un tratamiento especial. Debido a las grandes cantidades que producen las plantas, será complicado llegar a una solución.

Por otra parte, se encuentra la reacción que ha ocasionado la decisión de Alemania. A diferencia de ellos, el resto de Europa parece mantener su apoyo a la industria nuclear e incluso han redoblado sus esfuerzos para crear más plantas. Esto debido al alza de los combustibles fósiles y al poco impacto ambiental que genera la energía nuclear en comparación a los demás tipos.

En este aspecto, Alemania rema a contracorriente. No obstante, parecen seguros en su decisión y seguirán buscando alternativas amigables con el medio ambiente para cubrir su demanda energética.

Con información de AP News.

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