Tel Aviv.- Al menos 51 civiles palestinos perdieron la vida y muchos otros resultaron heridos durante un ataque aéreo israelí en un campamento de refugiados en la Franja de Gaza. El ataque de las FDA tuvo lugar en el campo de refugiados de Al-Maghazi.

Según informes de la agencia WAFA, aviones de combate israelíes llevaron a cabo el bombardeo en la mencionada residencia, ocasionando la destrucción de la casa objetivo y daños significativos en las viviendas e infraestructura circundante. Además, se reportó que los aviones utilizaron bombas de fósforo blanco, una sustancia prohibida internacionalmente, en los barrios occidentales y septentrionales de Gaza, incluyendo el campo de refugiados de Al-Shati.

En otro incidente, las fuerzas de ocupación israelíes realizaron al menos 15 ataques aéreos cerca del Hospital Indonesio en el norte de Gaza. Asimismo, se perpetró un ataque aéreo contra el principal pozo de agua en el área de Tel Al-Zaatar, provocando que el agua se desbordara hacia las viviendas y vecindarios circundantes.

Israel mantiene sus ataques sobre Gaza a pesar de las condenas internacionales

La noche anterior, los equipos de rescate y defensa civil lograron recuperar los cuerpos de cinco personas fallecidas en un ataque aéreo israelí contra la casa de la familia Abu Hasira, ubicada al oeste de la ciudad de Gaza. Las labores de búsqueda y rescate continúan en busca de los cuerpos restantes y para auxiliar a los heridos atrapados bajo los escombros.

Según el Ministerio de Salud, desde el 7 de octubre se ha registrado un alarmante aumento en el número de víctimas, con al menos 9,572 personas fallecidas y más de 26,000 heridos. En Gaza, se reportan 9,425 palestinos muertos y más de 25,000 heridos, mientras que en Cisjordania se contabilizan 147 fallecidos y más de 2,200 heridos.

Este último episodio de violencia se suma a los trágicos sucesos ocurridos durante la semana pasada, cuando las Fuerzas de Defensa de Israel atacaron el campamento de refugiados de Jabalia. Este ataque provocó el derrumbe de varios edificios y se estima que cobró la vida de entre 50 y 100 personas, dejando además a varios cientos de personas heridas.

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