En medio de las protestas que han sacudido a Venezuela tras la reelección del dictador Nicolás Maduro, la violencia ha cobrado la vida de al menos once civiles, incluyendo dos menores de edad.  Esta cifra ha sido confirmada por diversas organizaciones de defensa de los derechos humanos como el Foro Penal, la Justicia, Encuentro y Perdón (JEP), Provea y el Laboratorio de Paz.

Alfredo Romero, director de Foro Penal, expresó su preocupación por el uso de armas de fuego en las manifestaciones que se han desencadenado en Caracas y otras ciudades de Venezuela.

«Hay once personas fallecidas en estas propuestas. Cinco de estas asesinadas en Caracas, dos en el estado de Zulia, dos en Yaracuy, una en Aragua y otra en Táchira. Nos preocupa el uso de armas de fuego en estas manifestaciones«, declaró Alfredo Romero, además de que detalló que entre los muertos hay dos menores de edad.

En una rueda de prensa, se informó que hasta el momento se han realizado 177 detenciones, principalmente en Caracas, seguido por el estado Barinas y Zulia. Lexys Rendón, coordinadora del Laboratorio de Paz, señaló que se han registrado un total de 210 protestas en todo el país, las cuales fueron reprimidas por las fuerzas de seguridad del Estado venezolano.

Las fuerzas de seguridad, compuestas por la Guardia Nacional Bolivariana y la Policía Nacional Bolivariana, así como los llamados «colectivos» vinculados al gobierno, han respondido de manera violenta a las manifestaciones pacíficas, disparando gases lacrimógenos y balas de goma contra los manifestantes que demandan justicia y denuncian un fraude electoral.

El alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Türk, quien ha denunciado el uso desproporcionado de la fuerza por parte de las autoridades venezolanas y de los grupos armados afines al régimen de Maduro. Añadió que recibió reportes de heridos de bala durante las propuestas, con una muerte confirmada el 29 de julio.

En un comunicado, el alto comisionado ha instado a las autoridades venezolanas a respetar el derecho de los ciudadanos a manifestarse pacíficamente y expresar sus opiniones libremente. Asimismo, ha pedido que se sancione a los responsables de la violencia desatada en las protestas contra el fraude electoral. «Las autoridades electorales deben realizar su trabajo de forma independiente y sin interferencias», señaló.

La comunidad internacional ha mostrado su preocupación ante la crisis política y la violencia que ha envuelto a Venezuela en medio de la controversia por los resultados de las elecciones. Mientras tanto, los venezolanos continúan exigiendo justicia, libertad y democracia en las calles, a pesar de la represión y la violencia que enfrentan.

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