Washington.- El presidente Joe Biden ha anunciado su intención de triplicar los aranceles del acero y el aluminio chinos importados por Estados Unidos, con el objetivo de impulsar la competitividad de la industria nacional y proteger los empleos de los trabajadores estadounidenses. La Casa Blanca destacó que esta medida se debe a la «competencia injusta» por parte de China, que ha estado favoreciendo a sus industriales locales a través de políticas y subsidios.

Biden, quien busca la reelección en noviembre, ha solicitado a su Representante Comercial (USTR) que plantee la propuesta de triplicar los aranceles actuales, que se sitúan en un promedio del 7.5%, sobre una parte del acero y el aluminio chino importados. Esta decisión se enmarca en su estrategia para demostrar su compromiso con los obreros y los sindicatos, como lo evidencia su visita a la sede del sindicato metalúrgico USW en Pittsburgh, Pensilvania.

Además, la administración de Biden ha lanzado una investigación sobre las supuestas prácticas desleales de China en sectores como los astilleros, el transporte marítimo y la logística. Esta investigación responde a denuncias de organizaciones sindicales que señalan a China como un país con políticas «más agresivas e intervencionistas que las de cualquier otro país». La Casa Blanca subrayó la importancia del acero en la industria nacional, especialmente en la construcción naval.

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